Carlos Nieto había logrado lo más difícil. El canterano, sin hacer ruido, había acabado de raíz con cualquier debate y, a base de actuaciones notables, se había adueñado del lateral izquierdo del Real Zaragoza. No había discusión. Nieto siempre aparecía en la foto. Hasta que una lesión lo cambió todo aquella tarde en Cartagena.
El grave percance de Nieto, que estará al menos seis meses fuera de los terrenos de juego, ha dejado huérfano a un Zaragoza que, a la espera de la recuperación de Lecoeuche, se encuentra en plena búsqueda de un sustituto que mitigue algo el dolor por la pérdida del aragonés, al que Escribá consideraba «el mejor lateral izquierdo y uno de los mejores jugadores del campeonato» cuando cayó en Cartagonova, tal y como aseguró el técnico en una entrevista concedida esta semana a este diario. La prueba con Gámez ante el Racing no salió como se esperaba, así que Escribá le dará una vuelta. Francés es la opción menos arriesgada. Borge la más osada.
En cualquier caso, volverá a ser un diestro el que ocupe la izquierda. «No pasa nada, hay muchos jugadores a pierna cambiada», vino a decir el entrenador en vísperas del choque de hace diez días ante el Racing. Carlos Vicente, el rápido extremo aragonés que lidera al Ferrol, pondrá a prueba al elegido por el cuerpo técnico zaragocista.
No lo tendrá fácil el que ocupe el puesto. La sombra de Nieto sigue siendo muy alargada. De hecho, al Zaragoza le iba muy bien con el canterano en el flanco izquierdo, con el que tan solo había caído derrotado en uno de los 18 últimos partidos en los que Nieto había formado en la foto (13 de la pasada campaña y los cinco de la actual hasta que se lesionó en tierras murcianas).
El balance es demoledor. Nueve victorias (cuatro de la pasada temporada y las cinco consecutivas del inicio de la actual), ocho empates y un solo traspiés (el curso pasado en Oviedo, donde el Zaragoza cayó 2-1).
Se trata de aprender a vivir sin Nieto y encontrar el mejor remedio posible hasta que asome el recambio natural. No queda otra que seguir buscando.