Soberón alarga más su pesadilla

Riazor tampoco apunta a ser el escenario de la vuelta de Mario Soberón, que cumplirá, salvo giro en el entrenamiento de este viernes en cuanto a las sensaciones que nota, ante el Deportivo dos meses desde aquel 11 de octubre en el que se lesionó en Tenerife con una microrrotura en el isquiotibial izquierdo para la que en un principio se le diagnosticaron solo 12-15 días de baja. Sin embargo, acumulará, si se confirma, ante el Deportivo nueve jornadas de Liga (Almería, Eldense, Castellón, Granada, Huesca, Málaga, Córdoba y Albacete se perdió ya), además de los dos de Copa, ante Hospitalet y Granada. Precisamente en ese partido ante el cuadro granadino volvió a la lista, pero no llegó a jugar en la parte final del duelo, al sentir malas sensaciones en el calentamiento.

Iván Azón entrena con el resto y Soberón al margen en una sesión muy reducida

Soberón y Nieto, que sufrió una sobrecarga antes de jugar ante el Granada, donde iba a ser titular, tampoco se han ejercitado con el grupo esta mañana en la Ciudad Deportiva y completarán una lista de bajas para Riazor que ya integraban Bazdar, que no volverá hasta 2025 por su lesión muscular ante el Albacete, Kosa, que también es baja hasta el nuevo año, y Borge, que aumenta su trabajo con el grupo (esta mañana también se ha ejercitado), pero que aún le queda para estar a plenitud física en ritmo de entrenamientos, ya que fue operado de la rotura de la plastia del cruzado en marzo.

Azón, en plenitud

Del filial han estado Sabater y Mañas, y el segundo, máximo goleador del filial, apunta a ir a Riazor tras debutar en Copa ante el Granada, jugando toda la prórroga y fallar el penalti decisivo en la tanda, el sexto. Azón, que no fue convocado en ese partido por un golpe ya se ejercitó el miércoles sin problemas y este jueves lo ha hecho también, por lo que volverá a ocupar la punta de lanza del ataque. Mientras, Víctor, en la parte que pueden ver los medios de comunicación, los 15 minutos iniciales, ha estado hablando con Calero y Tasende.

El que más preocupa, sin duda, ahora mismo es Soberón, porque es un problema de sensaciones, ya que los plazos de recuperación están cumplidos. El ariete, Pichichi del equipo con 6 dianas junto a Azón, intentó volver antes del Castellón, a finales de octubre, pero recayó y la semana pasada completó dos entrenamientos para que en esta se ejercitara el lunes y con el grupo y entrara en la lista. Sin embargo, no jugó. "Estaba para muy poco, si es que estaba. Y yo creo que no ha tenido buenas sensaciones en el calentamiento. Igual mañana o pasado está mejor y lo recuperamos a plenitud. También era un partido complicado para gestionar porque se veía que se iba a llegar a la prórroga", dijo Víctor tras el choque con el Granada, cuando unos días antes había asegurado ya "ver la luz" con la vuelta del punta cántabro.

La visión de Víctor

Mientras, el 22 de noviembre, cuando Soberón se ejercitó un par de días en esa semana y al final volvió a hacerlo al margen antes de jugar el equipo en Córdoba, el entrenador contó algo más de su caso. "Se está alargando su recuperación porque sus sensaciones no son buenas. Intentó hacer hace dos días un entrenamiento y no está cómodo, no se siente seguro. Un día le molesta el isquio, otro la zona del sóleo, otro día la zona de la rodilla... No logra encontrar ese estado de seguridad y confianza en su cuerpo y si no puede entrenar lógicamente, no puede competir", resumió el entrenador, que añadió: "Cada cuerpo es como es y la evolución de las lesiones no son las mismas en todos los jugadores. Se le han hecho muchas pruebas, se está trabajando en su recuperación. El chaval lo está pasando mal y yo también lo estoy porque estoy imposibilitado para alinear a un jugador que ha metido seis goles en menos de mil minutos".