La roja excesiva a Dani Gómez, el VAR y la caída del Zaragoza de Miguel Ángel Ramírez hacia la zona roja

Miguel Ángel Ramírez se presentó en el partido ante el Burgos con una alineación totalmente revolucionada, tanto en la elección de los nombres como en la manera de jugar. Hubo novedades de arriba abajo, con cambio en la portería (Femenías entró por Poussin tras su error en Albacete y varias actuaciones dubitativas seguidas), el técnico rompió su trío preferido atrás (Lluís, Vital y Clemente, sentando al aragonés), entraron en el once Adu Ares tras sus extraordinarios 15 minutos de la pasada semana, Aketxe en la mediapunta y Marí en compañía de Dani Gómez en la delantera. Liso y Bazdar se quedaron fuera de la titularidad.

Aunque la forma de desplegar a sus equipos en el campo es muy móvil y con numerosos matices en ataque y en defensa, Ramírez rompió de inicio por primera vez la base sobre la que había intentado construir desde su llegada sacrificando a un peón, Clemente. A los laterales, Calero y Tasende, les volvió a dejar el campo largo para que tuvieran prado para correr. A Adu y Francho los incrustó en zonas interiores y Arriaga estuvo de nuevo en el inicio de las jugadas.

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El objetivo de Ramírez con tanto cambio para su tercera aparición en La Romareda, donde anteriormente había sumado dos empates, fue tratar de acercarse a la victoria de otra manera a cómo lo había buscado previamente. En la primera parte, la continuidad en el juego no fue buena ni tampoco el ritmo, pero conforme el partido iba consumiendo minutos, el Real Zaragoza empezó a vivir más cerca del área del Burgos. En cualquier caso, el peligro lo llevó sobre todo en dos acciones a balón parado: dos faltas lanzadas por Aketxe, la primera un obús despejado por Cantero y la segunda por la parte de arriba del larguero. El Burgos también tuvo sus chances, alguna muy clara.

Era un encuentro de cocción larga y sin grandes oportunidades. Todo cambió en el minuto 54 cuando Dani Gómez fue expulsado en una entrada destemplada y fuera de lugar. En cualquier caso, una roja directa excesiva de Sánchez Villalobos y que el árbitro del VAR ni siquiera invitó a revisar. Segunda acción polémica en contra en dos jornadas consecutivas después de lo ocurrido en Albacete.

Cuando todo se hace insoportable

Reconstruido con Keidi en el medio y Bazdar y Liso arriba, el Real Zaragoza mantuvo bien el tipo con un hombre menos, tuvo un par de buenas acciones de peligro en la cabeza de Lluís López y los pies de Bazdar, pero quien golpeó con un crochet letal fue Íñigo Cordoba con un gran zurdazo desde la frontal, desde donde disparó más solo que la una. El partido estuvo totalmente condicionado por la roja a Gómez. Eso es indiscutible.

Tanto como que después de seis jornadas en el banquillo, Ramírez no ha conseguido que su equipo carbure con continuidad. Ha firmado algún partido notable y tramos de buen nivel en varios más. El resto, nada. Por supuesto ninguno redondo ni con el nivel ofensivo suficiente para pensar en escalar en la tabla y no seguir cayendo lentamente y en silencio. Los números no mienten: 5 de 18. A eso tendrá que ponerle remedio el entrenador con prontitud. Ahí es donde está el problema, en que la zona de descenso queda ahora mismo a seis puntos, no en mundos imaginarios pensados para despistar a los despistados.