Un punto tras un bochorno

El Zaragoza rescata con dos goles en el descuento un empate tras una infame segunda parte ante un Granada con diez durante más de una hora por la roja a Gonzalo Villar. Los tantos de Marí y Pau Sans no tapan un mal partido y las enormes dudas

Resumen, goles y highlights del Granada 2-2 Zaragoza de la jornada 28 de LaLiga Hypermotion

Santiago Valero

Santiago Valero

Sacó un punto en el descuento el Real Zaragoza con dos goles después de una oda infame a la impotencia en la segunda parte, con un jugador más por la roja que había visto Villar pasada la media hora. El Granada amplió la ventaja que había logrado Abde Rebbach con otro tanto Tsitaishvili y tuvo al Zaragoza noqueado, como si fuera un espectro sobre Los Cármenes, un desastre terrible en las formas y en el uso de los recursos por parte de un muy extraviado Miguel Ángel Ramírez. Pero, cuando ya casi nadie lo esperaba, donde no había fútbol salió la fe. Marí, tras un córner y Pau Sans con un centro que se le coló a Luca Zidane y que habilitó el VAR dieron un valioso punto a un equipo que fue un bochorno muchos minutos.

Por encima de ese rescate de última hora y casi milagroso, el Zaragoza dejó un aluvión de dudas, de interrogantes sobre su estado, que no es bueno, o que es muy malo, mucho más jugando contra un rival en inferioridad durante una hora y que pudo dejar el pleito visto para sentencia en el segundo acto. El paso, aunque pequeño, es valioso, dejando el descenso a siete puntos a la espera de lo que haga el Eldense este domingo, pero sobre todo la sensación es de alivio por el dramático nivel del Zaragoza, en particular y mucho tras el descanso.

Con tantas bajas y jugadores con molestias, Ramírez le dio otra vuelta al once, con cinco cambios, y con Arriaga y Jair en el eje para presentar una versión muy ofensiva, en la que Soberón volvía a ser titular tras más de cuatro meses en un 4-2-3-1 con Francho y Keidi Bare en la sala de máquinas y Bazdar de referencia para dejar los costados a Adu Ares y a Liso, a pierna cambiada ambos ante un Granada en el que Escribá se traicionó a sí mismo por las bajas en el lateral zurdo y jugó con tres centrales y Tsitaishvilli de carrilero.

Y el Zaragoza, con esa versión tan valiente, con una presión alta, empezó asustando al Granada, con Francho omnipresente y dando un paso adelante en la fase defensiva y con un primer aviso de Soberón y otro después del canterano. Liso estaba activo en la banda derecha, aunque con dificultades en el centro y Bazdar se dejaba ver en un Zaragoza que era mejor que el rival, pero le faltaba contundencia. Bazdar estuvo a punto de provocar el error de Luca y una combinación del serbio con Liso acabó en un peligroso centro que Lama despejó con apuros. Era superior el Zaragoza, pero el primer guantazo del Granada lo mandó a la lona. Escribá volvió a su plan, al 4-4-2 y Abde Rebbach, reubicado en el costado izquierdo, encaró a Calero, que le dejó mucho espacio, Liso estuvo flojo en la ayuda y el extremo cedido por el Alavés recortó a Francho y la mandó a la escuadra de Femenías a los 23 minutos.

El Zaragoza fue mejor de salida y se cayó tras el 1-0 para que Ramírez hiciera una pésima gestión de los recursos en una segunda parte que fue un terrible desastre salvó el arreón final con los goles de Marí y Pau Sans

El marcador era injusto y el Zaragoza trató de levantarse con un mal disparo del desacertado Calero antes de que una buena presión de Keidi y Francho sobre Villar acabara en una peligrosa entrada sobre el canterano que dejó al Granada con 10 a los 35 minutos y todo un mundo por delante. En superioridad, el Zaragoza dio otro paso hacia la portería rival. Un disparo de Tasende lo despejó Luca Zidane con apuros y Soberón notó la inactividad estando lento en el control para que al intermedio se llegara con un mal remate de Liso tras una buena acción entre Francho y Ares.

No tocó nada Ramírez al descanso y Escribá reforzó la medular con Hongla antes de que Boyé sacara los colores a Tasende y Tsitaishvili rematara a gol con el desvío de Arriaga y Femenías de nuevo batido en el 47, porque el arquero, sin culpa en los goles que le marcan, para muy pocas cosas. Pudo llegar el 3-0, pero la bota de Manu Lama lo inhabilitó tras un córner muy mal defendido. El Zaragoza era un zombi y Ramírez decidió que aumentara la confusión, con Cuenca de lateral derecho y Marí y Pau Sans al campo para que el canterano empezara a dar algo de luz.

De mal en peor

Con Ares y Liso sin poner un buen centro a pierna cambiada ni desbordar, con Boyé campando a sus anchas y con el Zaragoza empequeñecido hasta extremos sonrojantes, el Granada era amo y señor. Boyé y Rodelas, recién entrado, tuvieron sendas ocasiones antes de que Ramírez volviera a jugar al doctor Frankenstein retrasando a Liso al lateral zurdo con la entrada de Aketxe, una confusión total.  Solo Pau Sans mantenía el tipo y, cuando todo parecía perdido, sin un disparo a puerta en toda la segunda mitad, Marí, en un córner de Aketxe la mandó a la red y, en ese arreón en los últimos instantes, un centro de Pau Sans no lo tocaron ni Marí ni Cuenca y acabó en la red con el suspense del VAR para sumar un punto valioso tras un sofoco tremendo. 

Tracking Pixel Contents