Cristian y Poussin, dos goles y una historia con muchos tintes similares
El resultado, la ejecución de cabeza, el momento del partido en el descuento y el contexto, en el tramo final de Liga y con el equipo en serios apuros, en las temporadas más duras en esta etapa en Segunda, permiten comparar el cabezazo del argentino en Lugo con el del francés ante el Eibar

Cristian y Poussin, tras marcar su gol en Lugo y en la Romareda el sábado, respectivamente. / PRENSA 2 / LALIGA
No hay dos goles iguales, tampoco los de Cristian Álvarez y Gaetan Poussin en el Real Zaragoza, ambos con la rareza de que sea el portero el que los marca, algo poco habitual, ni tampoco hay dos partidos idénticos, ni que tengan exactamente el mismo contexto. Sin embargo, el tanto conseguido por el arquero argentino en Lugo, su primero y único como profesional, y el firmado por el meta galo ante el Eibar, evocan, con casi cuatro años de diferencia, desde el 30 de abril de 2021 al pasado sábado 12, 1.443 días en concreto después, momentos que traen connotaciones similares y no solo por el instante decisivo en el partido de ambos, en el descuento, por la ejecución de cabeza y porque los dos dieron un punto que suponía el 2-2 final.
El del Anxo Carro, en la jornada 37 de esa Liga en la 20-21 sin espectadores en las gradas en la pospandemia, fue clave para dar el último empujón a la salvación del Zaragoza de JIM, con siete puntos de los siguientes nueve para certificar la permanencia de forma matemática tres semanas después. Aquella derrota momentánea con el gol de Fede Venancio en el 80 era una tragedia para el Zaragoza, que no caía a descenso, pero que veía acercarse al propio Lugo y que se habría quedado solo con dos de renta con el infierno con más equipos implicados en la lucha, como los hay ahora.
Cristian: "Es un recuerdo muy sanador, un momento que cada vez que lo revivo me genera mucha alegría, es un pequeño tesoro que guardo dentro de mí, porque traer esa imagen me hace muy bien»
Más allá de que la ventaja pasó a ser de tres con cinco partidos por delante, el cabezazo de Cristian y con la oposición de un defensa del rival en una falta lanzada por Bermejo pasado el minuto 96 fue un impulso de moral tremendo. "En la vida había vivido una situación así. Vi que entraba la pelota y no sé cómo fue. Creo que le di con la cara, tocó al defensa y entró. No sé muy bien qué pasó. Es mi primer gol. Estoy en un sueño", decía tras ese partido el argentino, retirado en enero y uno de los mejores porteros de la historia reciente del club. "Es un recuerdo muy sanador, un momento que cada vez que lo revivo me genera mucha alegría, es un pequeño tesoro que guardo dentro de mí, porque traer esa imagen me hace muy bien, además de lo que significó para estar más desahogados en ese tramo final de una temporada que fue la más oscura que vi en cuanto al futuro», decía el propio Cristian en una entrevista a este diario unos meses después.
Y es que aquella 20-21 fue una temporada muy difícil tras no lograr el ascenso después del covid en la anterior. A diciembre se llegó con el equipo penúltimo en la jornada 18 tras los pasos de Baraja e Iván Martínez para que JIM empezara a construir un milagro que tuvo en el gol de Cristian un impulso decisivo. Un empate ante el Espanyol y las victorias frente a Las Palmas y el Castellón sellaron el objetivo en la temporada más difícil en esta complicada travesía en Segunda... hasta que llegó la actual campaña.
Chilavert completa el cuadro de porteros goleadores en el Zaragoza
Hay poca distancia en el tiempo entre el gol de Cristian y el de Poussin, pero sí existe mucha más con el primero logrado en un partido oficial, no incluyendo amistosos ni tandas de penaltis, por un portero del Zaragoza. Lo firmó Chilavert el 28 de enero de 1990, cuando de penalti batió a González, arquero de la Real Sociedad para que instantes después el equipo donostiarra sacara rápido de centro y llegara el tanto de Goikoetxea con el paraguayo celebrando aún su diana en un partido que acabó con victoria por 2-1. Además, como curiosidad, el Eibar, que sufrió el gol de Poussin en el descuento el sábado empató la jornada pasada ante el Oviedo de la misma manera, con un cabezazo de Magunagoitia en el descuento.
Porque el curso actual ya es por derecho propio el de mayores penurias, con la puntuación más baja tras 35 jornadas, con esos 41 puntos, junto a esa 20-21 y a la 18-19, y la de mayor sensación de peligro. El gol de Poussin, este en un córner de Toni Moya en el 92 y con un cabezazo mucho más ortodoxo, y sobre todo más limpio y claro que el de Cristian, con un remate con todas las de la ley y sin oposición, porque nadie del Eibar le siguió y le marcó, también es un pequeño tesoro en la tabla, con ese punto, y está por ver si da el impulso anímico que ofreció el de su homólogo.
"De inicio miro al míster y me dice de subir, voy y sé que a Toni (Moya) le gusta tirar los córners al primer palo. Me he dicho que voy como un animal al primer palo y he tocado de cabeza y gol. Salto un poco y la toco, pero Toni la pone bien. Pudimos hasta ganar al final con algún córner más", explicó el arquero, que tras el encuentro dialogó con Cristian y salió la inevitable comparación: "He hablado con él y estaba muy alegre e ilusionado porque es zaragocista como el que más. Él lo logró también en un 2-2 y en el último minuto, lo hemos comentado, sí".
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