La montaña rusa sobre la bocina del Real Zaragoza

Mirando solo a los tramos finales de los partidos, el Real Zaragoza sería líder de Segunda, una clasificación en todo caso utópica, pero que refleja la fe del equipo, uno de los pocos valores irrefutables en este difícil curso, donde en 11 partidos ha sido capaz de retocar el marcador para sumar puntos, hasta 19, en los últimos minutos de cada duelo, con el ejemplo más reciente del gol de cabeza de Poussin al Eibar en el descuento y remarcando que en tres de los cuatro partidos con Gabi ha podido sumar gracias a goles en ese tramo decisivo, señal de que el entrenador madrileño también ha sido capaz de retomar una senda de fe que se había perdido en la última parte de la era de Ramírez. Sin embargo, en otros nueve duelos en esta temporada el Zaragoza dejó escapar botines en el tramo final, en los últimos 20 minutos, con hasta 10 puntos extraviados al final para que la cara al pitar el colegiado fue de lamento por el golpe sufrido a última hora.

No hay lesión grave en la rodilla de Kervin Arriaga

En ese balance se mueve ahora el Zaragoza, con la sonrisa por ese cabezazo de Poussin que salvó un punto sobre la hora cuando la derrota ante el Eibar era una tragedia. Una semana antes, Jair, dio la victoria en el 78, y en el estreno de Gabi, ante el Córdoba, Soberón deparó el empate al transformar un penalti en el 84. Es decir, cuatro de los cinco puntos con el nuevo entrenador han llegado con tantos en la recta final. No cabe duda de que el Zaragoza con él ha retomado esa senda que tantos réditos le ha dado.

Y esa capacidad se empezó a mostrar nada más arrancar la temporada. En la segunda jornada, en Cartagena, Pau Sans y Francho voltearon la derrota zaragocista en el Nuevo Cartagonova en los últimos 14 minutos, contando la prolongación, mientras que Bazdar frente al Levante dio la victoria con su diana en el 86. En Tenerife, con un 2-0 en contra, desde el 74 llegaron dos goles de Bazdar y otro de Iván Azón para vencer, y en Elda, en el Nuevo Pepico Amat, el tanto de Liso para ganar también se dio a falta solo de una decena de minutos.

Con Víctor y con Ramírez

Francho firmó tablas ante el Deportivo en Riazor en el descuento y, ya con Ramírez, el Tenerife volvió a sufrir la fe inquebrantable del Zaragoza como en la primera vuelta en el Heliodoro, con dos goles en un minuto de Clemente y Azón para empatar cuando el partido se había adentrado ya en el cuarto de hora final, mientras que una semana más tarde, en Málaga, la única victoria con el entrenador canario se sustanció con una diana de Pau Sans en el 74. Por último, en Granada, la capacidad de no rendirse del Zaragoza alcanzó su cota más alta, con dos dianas en el descuento, de Marí y Pau Sans, aunque aquel equipo de Ramírez ya estaba por entonces herido de muerte.

Sin embargo, la recta final de los choques de este Zaragoza tan irregular y débil también ha traído no pocos sofocos. En Burgos, en la quinta jornada, el gol de la victoria de Álex Sancris llegó en el descuento, mientras que Aldasoro firmó el triunfo del Racing en La Romareda con una diana en el 72 tras empatar el equipo de Víctor. También Israel Suero para el Castellón ajustició al cuadro blanquillo y Quiles lo hizo de penalti para el Albacete, ambos duelos en La Romareda, que también vivió la puñalada final de Ilyas Chaira para sellar la victoria del Oviedo en la prolongación y provocar la dimisión de Víctor.

Ya con Ramírez, el Elche derrotó al Zaragoza en el descuento en el estreno del canario con una diana de Rashani e Íñigo Córdoba le dio la victoria al Burgos en La Romareda y Dubassin se la quitó al conjunto zaragocista en el último suspiro para que el Sporting se llevara un punto del municipal, que vivió su peor pesadilla del curso con dos tantos del Eldense, de Víctor García y Sekou, cuando el partido rondaba el cuarto de hora definitivo.