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Ver para creer. La previa del Sporting-Real Zaragoza

El Real Zaragoza se encomienda al tercer entrenador del curso para soñar con una cura para su estado crítico. Sellés debuta ante un Sporting radiante desde que Borja Jiménez tomó las riendas

Sellés, en un entrenamiento junto a Toni Moya y Tachi.

Sellés, en un entrenamiento junto a Toni Moya y Tachi. / Jaime Galindo.

Jorge Oto

Jorge Oto

Zaragoza

Se amontonan los cables y las máquinas en torno a un Real Zaragoza con aspecto de caso perdido. El equipo aragonés se ha instalado en la unidad de cuidados intensivos, donde su estado es crítico. Las constantes vitales con cada vez más débiles y el paciente lleva tiempo con respiración asistida sin que existan demasiadas esperanzas en que salga de esta, pero ahí sigue, peleando por su vida.

En busca de cura para ese mal se ha recurrido a un galeno nuevo, el tercero que asume los cuidados del ilustre paciente. Rubén Sellés es la esperanza ahora para encontrar remedio, si es que lo hay. Cada vez con menos tiempo y fe, el Zaragoza afronta esta tarde el primer día del resto de su vida, con la esperanza en que sus días no estén contados.

El partido en tierras asturianas supone un ver para creer para un zaragocismo destrozado. Colista y a cinco puntos ya de la salvación, el conjunto aragonés afronta la cita en El Molinón consciente de que en la pelea por la supervivencia no importa el tamaño del oponente. Tampoco su ferocidad. El Sporting, al que Borja Jiménez ha cambiado la cara y la vida, espera a un rival herido de muerte, pero que aún respira, En su caso, el estado y un aspecto son radicalmente opuestos a los del Zaragoza. Fresco como una rosa y con una salud de hierro, el cuadro asturiano se antoja mal enemigo para ese alma en pena al que Sellés pretende insuflar una dosis extra de oxígeno que le mantenga entre nosotros.

En esa dramática cuenta atrás ha convertido el Real Zaragoza la temporada. Apenas se han recorrido las diez primeras jornadas (menos de un cuarto del campeonato) pero parece una eternidad. Es lo que tiene no ganar nunca, acumular fracasos y hundirse en cuerpo y alma al final de una tabla clasificatoria que no concede tregua ni a la pereza ni al insoportable caos en el que el Zaragoza ha envuelto el peor inicio de temporada de sus cerca de cien años de historia. Así que no queda otra que hacer, otra vez, borrón y cuenta nueva, soñar con que aún hay tiempo y rezar a todos los santos, ahora más que nunca.

Sellés inicia la búsqueda del milagro con numerosas incógnitas por resolver. Una de las principales alcanza a su capacidad para revertir el precario estado anímico de una plantilla que el pasado sábado paseó sus vergüenzas delante de su gente. No puede haber mayor infamia que el deshonroso recital ofrecido por los jugadores blanquillos ante la Cultural, que se apiadó de su raquítico oponente para no hacerle aún más daño que el provocado por una goleada (0-5) que ya es historia y que convirtió en pesadilla el sueño de un hombre bueno, Emilio Larraz, víctima de ese caramelo envenenado en que se ha convertido el Zaragoza en los últimos años para entrenadores de todo tipo: veteranos, recién llegados, de la casa o foráneos. Raro es el que no acaba sucumbiendo a los perniciosos encantos de esa dama de blanco seductora al principio y tenebrosa después.

Está por ver si Sellés mantiene en la lucha a la mayoría de los protagonistas de las últimas afrentas u opta por introducir sangre fresca, como impone la misma lógica que señala un cambio en la portería tras encajar una goleada. Adrián podría volver a un marco escudado de cerca por Inusa y quizá Tachi en el centro, Pomares en la izquierda y tal vez el debut como titular de Aguirregabiria en la derecha. Saidu, ausente Paul por sanción al igual que Juan Sebastián, parece fijo en una medular en la que Guti o Francho parecen destinados a acompañarlo. Pero todo está en el aire. También los extremos y la delantera. Y el dibujo, de hecho.

En el Sporting vuelve Kevin tras su sanción y lo más probable es que Jiménez repita el once, sobre un 4-2-3-1, que ganó en Valladolid.

Alineaciones probables:

SPORTING: Yáñez, Rosas, Perrin, Vázquez, Diego, Smith, Corredera, Gaspar, Gelabert, Otero y Dubasin.

REAL ZARAGOZA: Adrián, Aguirregabiria, Insua, Tachi, Pomares, Saidu, Guti, Francho, Sebas Moyano, Cuenca y Dani Gómez.

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