Ya estamos camino de las tan esperadas vacaciones de verano para la mayoría de los españoles. Porque aunque agosto no comienza hasta el lunes, este viernes será uno de los días de más salidas del año. En coche, en tren, en avión...

Pero además de ser unos días de fiesta, descanso y alegrías, también es la época en la que nos podemos ver afectados de repente por una pérdida momentánea de audición, taponamiento o lesiones en el oído.

Esta sensación puede darse en un avión, buceando o viajando por una carretera de montaña a gran altitud.

Su nombre científico es barotrauma, ya que viene provocado por cambios barométricos, es decir, variaciones de la presión del aire o del agua.

¿Qué es un barotraumatismo?

El barotraumatismo es una patología que se origina por los cambios bruscos de presión, ya sea en el aire o en el agua, que ocasionan el taponamiento de los oídos.

¿Los principales culpables? Los indispensables del verano:

Los viajes en avión

De estos no hay mucho que explicar porque es bastante habitual que durante el despegue o el aterrizaje de los aviones se produzca un cambio de presión del aire de manera repentina.

Todos los habremos notado alguna vez. Se produce cuando la presión del aire no es igual a ambos lados del tímpano, y aunque los especialistas nos dicen que esta situación podría llegar incluso a desembocar en una rotura del tímpano, lo cierto es que es muy extraño que eso se produzca.

La razón es que sin quererlo estamos bastante protegidos de un desenlace tan grave. Porque el cuerpo humano es muy sabio y la conexión del oído con la rinofaringe, a través de la Trompa de Eustaquio, permite que el aire pueda entrar o salir manteniendo la presión constante.

Barotraumatismo, uno de los riesgos del buceo entre aficionados

Los baños en el mar

Los cambios de presión también pueden producirse en el agua. Y el submarinismo es la práctica deportiva del verano que con más frecuencia puede causar este traumatismo. Es más, de hecho se trata de la lesión más común entre las personas que practican este deporte.

Por eso la formación es un paso fundamental para evitar el barotrauma.

Saber cómo descender y ascender es prioritario para evitar que el organismo pueda sufrir daños debido a los cambios de presión.

Y muchas personas que estos días pueden llegar a la playa sin entrenar y se planteen los típicos retos de llegar lo más profundo posible... cuidado con asegurarse de descomprimir.

borotraumatismo es la dolencia de oídos más habitual en el verano

Síntomas del barotraumatismo

Los principales síntomas de esta afección son:

  • Mareo
  • Dolor o molestia en el oído en uno o ambos lados
  • Sensación de presión en los oídos (como si siguiéramos debajo del agua)
  • Sensación de congestión o taponamiento.
  • Hipoacusia o pérdida auditiva leve.
  • Acúfenos o ruidos molestos en el oído.
  • Vértigos o mareos con sensación rotatoria.
  • Otorragia o sangrado del oído.
  • Sensación de salida de aire por el oído.

¿Cómo se puede prevenir?

Aquellas personas que viajen mucho en avión, o los más asiduos al buceo, deben tener en cuenta los consejos de la Biblioteca Nacional de Medicina de los EE.UU. para evitar el barotrauma.

Las dos indicaciones que más destacan son claras:

  • El uso de un aerosol nasal para descongestionar
  • Evitar los cambios de altitud si se tiene una infección de las vías respiratorias altas o un ataque de alergia.

Maniobra de Valsalva

Además de estas dos claves, se recomienda practicar esta maniobra en los momentos de despegue o aterrizaje en aviones, y tras emerger en el submarinismo.

Es una práctica muy sencilla:

  • Tápate la nariz con los dedos en forma de pinza y mientras mantienes la boca cerrada, sopla tal como si te sonaras la nariz.

Y debes saber que se debe repetir la maniobra varias veces, para equilibrar la presión entre los oídos y la atmósfera.

Especialmente en las aeronaves es conveniente ventilar el oído con bostezos, movimientos mandibulares (con un caramelo) o masticando (chicle, por ejemplo).

Asimismo, en los bebés y niños pequeños, la succión del chupete o biberón pueden ser suficientes.

También es recomendable mantenerse hidratado, ya que en la cabina suele haber muy poca humedad ambiental.

Y también podríamos añadir la recomendación de evitar el alcohol y el café durante el vuelo, porque pueden incrementar el riesgo de rotura de vasos capilares.

Por último, pero no menos importante, no te duermas durante los despegues y los aterrizajes: hace falta estar despierto en estos momentos, por si sentimos presión en los oídos y necesitamos realizar estas técnicas de cuidado personal.