Restan cinco partidos, un mes de competición, para que el Huesca descifre con sus resultados la categoría en la que jugará la próxima temporada. Revisar el calendario de lo que queda es irremediable. Sin enfrentamientos directos, el equipo de Pacheta dispone de cinco balas para definir un futuro que se ha complicado tras tres derrotas en línea, la última este domingo ante el Getafe (0-2).

El Huesca comenzará esta nueva cuenta atrás volviendo al Alcoraz este sábado (18.30). Las restricciones por el covid reducen el efecto como local, donde únicamente se ha vencido esta temporada al Alavés, Granada y Elche. El próximo huésped será una Real Sociedad que está inmersa en la lucha directa por los puestos europeos junto a Villarreal y Betis, jueces sin quererlo de la lucha por la permanencia. Porque, salvo el Alavés, el resto de contendientes tendrá que medirse al menos con uno de ellos. En este sentido, el Huesca deberá cumplir con su visita al Benito Villamarín en la penúltima jornada (domingo 16 de mayo).

Los otros tres adversarios que le quedan al cuadro de Pacheta están en zona de nadie, sin muchas opciones de escalada y contando las últimas etapas para asegurar la permanencia. Dentro de este orden se enmarca el viaje a Cádiz (sábado 8 de mayo) y los dos encuentros más en El Alcoraz: Athletic (miércoles 12 de mayo) y Valencia (domingo 23 de mayo). Hace dos campañas fueron precisamente los levantinos los que certificaron el descenso azulgrana.

Esta semana se unificarán los partidos jugados. El Valladolid, ahora a dos puntos por encima del Huesca, cumplimentará el miércoles (19.00) el aplazado frente al Athletic en Zorrilla. Los pucelanos son precisamente el que, supuestamente, tiene el peor calendario, con cuatro duelos, encima los tres últimos, ante contendientes de la batalla europea: recibirá al Betis y a la Real Sociedad y se desplaza a los campos de Villarreal y cierra la temporada en el Wanda. Su otro partido será contra el Valencia en Mestalla (domingo 9 de mayo).

Habrá dos duelos directos. El primero será este fin de semana, entre el Alavés y el Eibar en Ipurua. Los vitorianos también tendrán que rendir cuentas con el Elche a domicilio en la 36ª jornada, que se disputará entre semana. Por el contrario, el cuadro babazorro únicamente se medirá con el Sevilla entre los siete primeros de LaLiga (domingo 23), teniendo en Mendizorroza dos compromisos, a priori, más asequibles: Levante y Granada.

El Elche recobró la ilusión tras su triunfo ante el Levante (1-0). Ahora tiene dos huesos duros de roer para mantener su racha. Este sábado viaja al Madrid colchonero y el viernes siguiente abrirá la jornada en Anoeta ante la Real Sociedad. Tras el ya mencionado duelo con el Alavés concluirá su ciclo desplazándose a Cádiz (domingo 16 de mayo) y recibiendo al Athletic (domingo 23 de mayo).

El Eibar es el colista y, por lo tanto, el que más complejo lo tiene. Tras enfrentarse ayer a la Real volverá a vivir un derbi vasco, este casi definitivo, ante el Alavés. Le quedarán dos viajes ante rivales de la zona de nadie como son el Getafe (domingo 9 de mayo) y Valencia (domingo 16 de mayo) y recibir en Ipurua al Betis (jueves 13 de mayo) y el Barcelona (domingo 23), que podría estar jugándose el título de Liga.

Cuentas y cábalas, previsiones en papel mojado, suposiciones que quedarán en la nada si el Huesca no recupera la confianza y el gol, las victorias que le hagan recuperar el espacio perdido y volver a situarse fuera de la zona de descenso. Aunque será ese 23 de mayo cuando se sepa si el esfuerzo ha merecido la pena.