Inicio soñado para la SD Huesca. Los pupilos de Nacho Ambriz, que debutaba en partido oficial como técnico oscense, superaron por 2-0 ante la SD Eibar, que venía con la vitola de ser el conjunto que mejor se ha reforzado en el mercado veraniego.
El equipo altoaragonés salió al campo con las idea clara de ser el dominador del balón desde el primer minuto ante un Eibar replegado atrás que tampoco hizo mucho por arrebatarle la pelota al conjunto azulgrana. Los dos primeros acercamientos del Huesca llegaron tras un córner que no llegó a rematar Pulido por centímetros y una gran internada de un incisivo Ferreiro, que sacó un centro que acabó en manos de Yoel. En el minuto 21, un gran pase de Pulido a la espalda de la defensa llegó a las botas de Joaquín que, con un buen control y un disparo a bocajarro, batió a un Yoel que, aunque tocó el balón, no pudo evitar el primer gol de la temporada para el cuadro aragonés.
El gol de los oscenses despertó una tímida reacción del conjunto vasco, que comenzó a intentar triangular alguna acción más elaborada, pero sin lograr generar peligro real ante un Huesca que se replegó e intentaba salir rápido a la contra. La primera mitad terminó sin ningún disparo a puerta del Eibar y con una sensación de tranquilidad y control por parte de los hombres de Ambriz.
El paso por vestuarios espoleó a un Eibar que salió con la clara intención de encerrar al Huesca en su área. Muestra de ello fue la doble intervención que tuvo que realizar Andrés Fernández a sendos remates de Stoichkov primero y Corpas después desde el suelo. La tónica se mantuvo durante los primeros compases del segundo acto y Ambriz, buscando recuperar el control del partido, preparó un doble cambio en el que Mosquera saltó al campo por Nwakali, impreciso durante los minutos que disputó, y Florian Miguel entró por Joaquín, autor del gol, de forma que Marc Mateu se posicionó en el extremo izquierdo.
Cuando más apretaba el Eibar y quizá cuando menos lo merecía la SD Huesca llegó el segundo gol. Tras una gran salida de balón de Cristian Salvador, el balón le llegó al recién entrado al campo, Florian Miguel que puso un gran centro raso al que, como si prácticamente de un penalti se tratase, remató Seoane con el interior al fondo de la portería armera.
El segundo gol local desinfló los ánimos de los vascos y auparon los de los aragoneses, que controlaron el partido bajo la batuta de un buen Mikel Rico y un magistral Seoane. Los minutos fueron pasando y el Eibar, con más pundonor que fútbol, volvió a arrebatar el balón al Huesca hasta el final del encuentro y dispuso de varias ocasiones como un remate al palo de Venancio, un cabezazo de Blanco Leschuk y ya en el descuento, un disparo que sacó bajo palos Pulido y una buena parada de Andrés con la que logró irse a casa manteniendo la portería a cero.
Con esta victoria, el Huesca sumó los tres primeros puntos ante un rival directo como la SD Eibar, a la que le falta ajustar todas sus nuevas piezas. Por su parte, los oscenses disiparon las dudas que existían alrededor del equipo y confirmaron en una tarde perfecta que, de nuevo, van a a pelear por el ascenso con una victoria de prestigio en la semana de San Lorenzo y en la vuelta del público a las gradas de El Alcoraz
