El Huesca busca volver a la senda de la victoria para despejar dudas

Para el partido ante los burgaleses, Nacho Ambriz anunció rotaciones en la alineación que disponga debido a la carga de minutos de varios de sus futbolistas. Lo que parece que no se va a modificar es el dibujo ya que el mexicano, aun sin haber dado con la tecla definitiva, cree haber encontrado el sistema en el que actualmente más cómodo se encuentra su equipo. Con el trivote en el centro del campo, el juego de los oscenses es más fluido y el equipo está más equilibrado.

Además este esquema favorece las rupturas de sus jugadores rápidos a la espalda de las defensas, situaciones en las que se está consiguiendo generar mucho peligro. Los grandes perjudicados de este sistema son las dos apuestas veraniegas para la punta del ataque, Isidro Pitta y Adolfo Gaich, que según el mexicano, aunque participen, necesitan más tiempo de adaptación al fútbol español. 

Para el encuentro son bajas Joaquín y Ferreiro. El once inicial es una incógnita debido a las rotaciones pero parece que con la vuelta de Pulido, Salvador volverá al trivote acompañado por Nwakali y Seoane. Buffarini dejará su sitió a Ratiu en el lateral derecho y arriba jugarán en bandas Marc Mateu y Escriche, mientras que la referencia ofensiva podría ser Pitta, que no tuvo minutos en el choque ante el Málaga.

Enfrente estará un recién ascendido como el Burgos pero que ha sabido adaptarse pronto a la exigencia de la categoría de plata. A pesar de las lógicas dudas de un debutante, poco a poco ha ido aumentando sus prestaciones. Es un equipo intenso, muy junto, construido desde la solidez defensiva y a veces le cuesta generar peligro. Suele jugar con defensa de tres y dos carrileros. El Huesca deberá prestar atención especial a su banda izquierda, formada por Matos y Saúl Berjón, y a Guillermo, su delantero referencia que tras un arranque irregular está comenzando a despertar. Los burgaleses se hacen especialmente fuertes en su feudo, donde solo han cosechado una derrota en lo que va de temporada y donde, por ejemplo, el Real Valladolid salió goleado. Además llega con la moral por las nubes tras conseguir la pasada jornada su primera victoria a domicilio por 1-3 ante el Oviedo.

Así que, a pesar de que a priori no vaya a resultar un partido sencillo, en la mano de la SD Huesca está abandonar la sensación que transmite el equipo de un constante quiero y no puedo y de lograr una victoria que coloque a los oscenses a tiro del playoff.