Veinte primeros minutos de ausencia en el campo del Real Valladolid y máxima efectividad de los oscenses, con dos goles en dos ocasiones, y otra acción fortuita en la segunda parte con otro tanto, le valieron al Huesca para sumar una victoria en casa que no lograba desde el pasado agosto, y confirma que el equipo de Pucela fuera de casa baja su rendimiento, aunque mereció más por su dominio y ocasiones, ya que tuvo más que el Huesca (3-2).

Tras los primeros minutos del partido de tanteo por parte de los dos equipos, el Huesca mucho más metido en el encuentro que su rival llegó con más facilidad al área del Valladolid, y no tardó en inaugurar el marcador con el gol del argentino Gaich de espuela, el primero que conseguía con la camiseta del Huesca, en una rápida jugada de Ratiu por la banda derecha, en el minuto 12.

Tras el gol de los oscenses el Valladolid, que todavía no había entrado en el choque, estiró las líneas sin ningún resultado y ocho minutos después llegaría el segundo gol del Huesca, en plena pájara de los visitantes, por medio del defensa central I. Miquel de cabeza, al adelantarse a su marcador Joaquín, encarrilando el partido el Huesca a su favor.

Tras el descanso el Valladolid siguió dominando el partido con el Huesca encerrado en su área y Plata acortó distancias. Pero cuando acariciaba el empate, Seoane logró el tercer gol que apuntillaba a los vallisoletanos, echando por tierra todo el dominio 65% que tuvo y el trabajo, aunque en el último minuto recortaría la desventaja Kike con un disparo por toda la escuadra.