El Huesca quiere recuperar cuanto antes sus señas de identidad para ser un equipo sólido y compacto y lograr su primera victoria de la temporada este sábado (21.00 horas) en el campo del Santo Domingo de Alcorcón en un partido entre dos equipos que tienen el mismo objetivo y las mismas urgencias.
El equipo de José Ángel Ziganda no acaba de mostrar una imagen de equipo fuerte y solvente, sobre todo en defensa, como venía haciendo hasta este año el conjunto del técnico navarro ya que encaja goles en todos los partidos y se muestra vulnerable cometiendo en defensa errores que le cuestan puntos. Al Huesca le está faltando confianza y le sobran ansiedad y nervios, lo que se traduce en precipitación y errores impropios en un equipo de Segunda división teniendo en cuenta que todos sus jugadores tienen experiencia en la categoría.
El partido ante el conjunto madrileño es importante para un Huesca que necesita mejorar las sensaciones que está dejando. El equipo está apurado y necesita ganar, y más a un rival directo por la permanencia y que también se encuentra en zona de descenso, porque es la única forma de salir de ella ya que a los empates los hacen buenos los triunfos.
Es difícil prever qué sistema de juego utilizará el equipo azulgrana en Madrid ya que va cambiando en cada partido y ya son cuatro los que ha empleado Ziganda en busca de dar soluciones a los problemas a los que se enfrenta en cada jornada. Sin embargo, estos cambios no han servido para ganar todavía después de seis encuentros disputados. Entre tanta variación de forma de jugar el 4-4-2 aparece como la opción más factible ya que es la que mejor resultado le ha dado hasta la fecha.
Dudas en el once
Para el encuentro de esta noche tal vez recurra Ziganda a los jugadores más veteranos para no regresar de vacío y vuelva Jeremy Blasco al centro de la zaga formando pareja con Jorge Pulido para que Miguel Loureiro regrese a su posición natural de lateral derecho. En el centro del campo podría ser casi el mismo que inició el partido anterior ya que el japonés Kento Hashimoto no tiene el ritmo necesario para salir de inicio.
Ziganda, en la previa del duelo ante los madrileños, reconoció el mal momento que vive el equipo, pero se mostró preparado para reconducir la marcha del equipo. «La situación a nivel profesional no es agradable, somos conscientes de lo que pasa, no nos gustan los resultados ni cómo lo estamos haciendo» reconoció, pero «esas cosas en fútbol se dan, y hay que saber llevarlo de forma que no te afecte a nivel profesional. La primera premisa es que el grupo se mantenga unido, no se rinda, que vayamos juntos en la misma dirección. Y la segunda, es hacer mejor las cosas. La primera, la tenemos y la segunda, la conseguiremos con trabajo» dijo
Y con esa premisa, el equipo va a Alcorcón, dispuesto a marcar un punto de inflexión. «A los dos nos está costando sacar los partidos. Espero un partido muy igualado, con dos equipos muy rocoso, armados y, dentro de esa igualdad, el que sea capaz de cuidar con más concentración y calidad los detalles, tendrá más posibilidades», analizó Ziganda. «Todos reclamamos una victoria, pero la tranquilidad y la confianza la tenemos que tener nosotros. No sirve de nada darle vueltas a nivel mental a todo el ruido externo y el no ganar», acabó.