La Guardia Civil interceptó ayer a 173 inmigrantes magrebís, entre ellos mujeres embarazadas y bebés, que trataron de llegar a las costas andaluzas de Granada y Cádiz hacinados a bordo de tres lanchas.

En la operación más importante, la Guardia Civil interceptó en aguas del Estrecho de Gibraltar dos lanchas neumáticas en las que viajaban un total de 142 inmigrantes indocumentados, entre ellos dos mujeres embarazadas de 8 meses, que trataban de alcanzar las costas de Tarifa (Cádiz). En la primera embarcación, de ocho metros de eslora y dos de manga, viajaban 77 inmigrantes varones. En la segunda fueron interceptados 65 varones de origen magrebí y subsahariano, entre ellos 7 mujeres, 2 de ellas embarazadas de 8 meses y un bebé de 5 meses.

Otros 15 inmigrantes fueron detenidos después de que hubieran desembarcado en la zona de Bolonia de la localidad gaditana, en una expedición en la que había cinco mujeres, dos de ellas embarazadas, y tres bebés, que fueron atendidos por la Cruz Roja.

En aguas de Granada se interceptaron, asimismo, dos pateras. En una de ellas viajaban dos menores, además de un hombre herido y otro enfermo, que fueron hospitalizados en Granada. Además, la Guardia Civil marítima interceptó en aguas cercanas a la costa de Tarifa a un inmigrante indocumentado de origen magrebí que navegaba sobre un flotador con el que había logrado cruzar el Estrecho de Gibraltar durante la noche ayudado por dos aletas de submarinismo y un remo.