Al final se impuso la tradición, y los Reyes, Juan Carlos y Sofía, serán los padrinos de la infanta Leonor, que será bautizada el próximo sábado 14 de enero en el palacio de la Zarzuela, tal y como informaron ayer fuentes de la Casa del Rey.

En la familia real española los Reyes suelen apadrinar al futuro heredero de la Corona. En este caso, la "lógica de los tiempos" --como dijo el príncipe Felipe-- apunta a que ese rango recaerá en la infanta Leonor, hecho que se consumará cuando se lleve a cabo la reforma constitucional para que los varones dejen de primar en el acceso a la Corona. De momento --y a falta de la existencia de descendientes varones--, la niña ocupa el segundo puesto en la línea de sucesión después de su padre.

Leonor recibirá las aguas bautismales del río Jordán en la pila bautismal románica de Santo Domingo de Guzmán, en el mismo lugar que el Príncipe, las infantas Elena y Cristina y los otros seis nietos de los Reyes.