El portavoz del Partido Popular en el Congreso y expresidente valenciano, Eduardo Zaplana, quiere que las fiestas de moros y cristianos pasen a estar protegidas por la Unesco para defenderlas de la "amenaza a la libertad de expresión" que en su opinión pesa sobre ellas, y que atribuyó a la Alianza de Civilizaciones promovida por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Zaplana anunció ayer en Alicante que su partido presentará una proposición no de ley para que el Gobierno pida a la Unesco que las fiestas reciban la calificación de Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad.

Zaplana ha hecho pública esta iniciativa después de que en los últimos días se haya conocido que varios pueblos de Alicante y Valencia han eliminado de sus festejos la destrucción de una figura que representaba a Mahoma, y de que las comparsas de Alcoy desfilasen por Nueva York con cristianos, pero sin moros. Representantes de la comunidad musulmana en España han solicitado, tras aparecer estas noticias en los medios, la supresión de los desfiles de moros y cristianos, mientras que otros representantes han defendido las fiestas, pero sin elementos ofensivos como los eliminados.

El expresidente valenciano dijo ayer sentirse preocupado "porque está extendiéndose una cierta amenaza a la libertad de expresión y una autocensura que no puede ser positiva". Según Zaplana, la Alianza de Civilizaciones "no puede ser un pretexto para que las mejores y más sanas tradiciones españolas, como son las fiestas de moros y cristianos, tengan que verse en dificultades".

"Bajo ningún concepto las exigencias de quienes nos coartan deben ser atendidas", proclamó Zaplana, quien argumentó que ni su propuesta ni las fiestas "pueden molestar a nadie", ya que estos desfiles "no constituyen en modo alguno la exaltación de una victoria o de una confrontación bélica".