El presidente de Mensajeros de la Paz, el padre Ángel, ha atribuido hoy a un posible "acto de locura" la muerte de los tres niños hallados sin vida en un centro de esta organización para menores con discapacidad, situado en la población vallisoletana de Boecillo, a unos 12 kilómetros de Valladolid.

El padre Ángel ha hecho estas manifestaciones en una rueda de prensa, en la que ha comparecido junto a la consejera de Familia de la Junta de Castilla y León, Milagros Marcos, para informar sobre el fallecimiento de los tres menores, con los datos que han podido facilitar, limitados por el secreto sumarial de las actuaciones que ha ordenado el Juzgado.

Los hechos se han conocido en torno a las 09:15 horas, cuando han sido hallados los cadáveres de los tres niños, de 3, 8 y 14 años, y se ha constatado que una monitora del centro, de 55 años, se encontraba herida, con cortes en las muñecas y en la cabeza, tras lo que ha sido conducida al Módulo de Vigilancia Penitenciaria del Hospital Clínico de Valladolid.

La monitora, ahora hospitalizada bajo custodia y que se ocupaba de cuidar a los menores durante las noches, al parecer fue hallada inconsciente cuando llegaron otras cuidadoras al centro asistencial, donde requirieron asistencia psicológica.

Nunca se ha tenido constancia de que la monitora que se encuentra lesionada hubiera padecido síntomas de depresión u otros problemas similares, ha asegurado el padre Ángel, tras calificar de "acto de locura" el fallecimiento de los pequeños, unas muertes que fuentes próximas a la investigación han atribuido a una posible asfixia con la supuesta implicación de la monitora hospitalizada.

Los fallecidos, una niña y dos niños según fuentes cercanas al caso, se encontraban en este centro de Mensajeros de la Paz, que llevaba casi un año abierto en esta población vallisoletana.