El autor confeso de la muerte de Mohamed, un niño bosnio de 4 años solicitante de asilo en Berlín, ha admitido ante la policía que también acabó con la vida de Elias, un niño de 6 años desaparecido desde julio en Potsdam, ciudad cercana a la capital alemana.

La fiscalía berlinesa informó hoy de la confesión del detenido y de los últimos detalles de un caso que ha sacudido a Alemania, pendiente desde el verano de la suerte de Elias y desde el pasado 1 de octubre también del destino de Mohamed.

El rostro del detenido era conocido en Alemania desde poco después de la desaparición de Mohamed, ya que la policía difundió un vídeo grabado por cámaras de vigilancia.

En las imágenes se veía al hombre alejándose junto con el niño del centro de registro para peticionarios de asilo de Berlín, donde se encontraba con su madre y sus hermanos hasta que desapareció.

El hombre, de 32 años, fue detenido ayer en Jüterbog, en el estado de Brandeburgo, que circunda Berlín, después de que su madre lo reconociera en las imágenes, hablara con su hijo y llamara a la policía.

Según informaron ayer la policía y la fiscalía, el hombre confesó los hechos y el cadáver del niño bosnio fue hallado en un maletero de su coche, medio cubierto de arenilla para gato.