El 48,7 % de los 597 conductores fallecidos el año pasado en accidentes de tráfico sometidos a autopsia había consumido alcohol, drogas o psicofármacos, lo que supone casi 4 puntos porcentuales más que un año antes y un incremento del 6,2 % en la última década.

La mayoría de los que dieron positivo a alcohol, un 78,5 %, arrojó una tasa muy alta, igual o superior a 1,2, que es cinco veces más de la máxima permitida al volante (0,25). Además, ha aumentado la proporción de peatones fallecidos por atropello en accidentes de tráfico con resultados toxicológicos positivos con respecto al año 2019. De 136 peatones fallecidos por atropello en accidentes de tráfico y sometidos a autopsia, 56 (41,2 %) dieron positivo.

Son las principales conclusiones de la memoria anual del Instituto Nacional de Toxicología sobre la incidencia del consumo de alcohol, drogas y psicofármacos en las víctimas de tráfico, presentada este martes y que recoge los análisis realizados a 597 fallecidos en accidentes viales, de ellos 291 conductores, 136 peatones y 72 acompañantes.

El alcohol sigue siendo la sustancia más consumida por los conductores fallecidos, seguido de cocaína y cannabis y, en tercer lugar, los psicofármacos. Así, un 31,2 % de las víctimas dieron positivo a alcohol, un 20,1 % a drogas y un 13,4 % a psicofármacos.

Varón de entre 25 y 54 años

Una inmensa mayoría de los casos (94,8 %) con resultados toxicológicos positivos correspondió a conductores varones, y solo el 5,2 % fueron mujeres, lo que, según la Memoria, "es obviamente un dato epidemiológico de gran transcendencia en el desarrollo de campañas de prevención de la siniestralidad vial". De forma mayoritaria los conductores con resultados positivos conducían un turismo (49,1 %) o una motocicleta o ciclomotor (39,2 %).

Además, el 68,4 % de los mismos tienen una media de entre 25 y 54 años y la mayoría de los positivos se producen en días laborables, independientemente de la edad.

Con respecto a los casos positivos a drogas, la consumida por sí sola fue la cocaína (60,8 %), seguida del cannabis (53,3 %). En cuanto los psicofármacos, los más consumidos por los conductores fallecidos fueron las benzodiacepinas (62,5 %), seguidas de los antidepresivos (40 %) y los opioides (26,2 %).

Los policonsumos (más de una sustancia) más habituales fueron alcohol y cocaína (51,9 %), seguido de alcohol y cannabis (23,1 %) y alcohol, cocaína y cannabis (15,4 %).

En cuanto a los peatones fallecidos, la mayor parte tenían 65 años en adelante; el alcohol sigue siendo la sustancia más consumida (53,6 %), seguido de psicofármacos (48,2 %) y de drogas (25 %). Entre los que dieron positivo a alcohol, el 73,3 % arrojó una tasa de alcoholemia igual o superior a 1,20. Los psicofármacos más consumidos por los peatones fallecidos fueron las benzodiacepinas, seguidas de los antidepresivos y los antiepilépticos.