Los gritos de auxilio que procedían de una de las habitaciones de la pensión Laborra, en el zaragozano barrio Delicias, rápidamente alarmaron al resto de huéspedes y a la dirección del propio establecimiento que no dudaron ni un minuto en llamar a la Policía Local. Rápidamente se trasladaron allí agentes pertenecientes de la Unidad de Apoyo Operativo (UAPO) que al entrar se encontraron una estancia llena de sangre y a un hombre agrediendo a su pareja sentimental sobre la cama. Inmediatamente fue detenido y ella trasladada urgentemente al hospital Miguel Servet de Zaragoza.
Una agresión machista que ocurrió alrededor de las 23.00 horas de ayer en este hostal situado en la avenida Duquesa Villahermosa. Cuando los agentes redujeron al sospechoso y fueron a identificarle comprobaron que es un viejo conocido de la Policía. Se trataba de Julián David Gracia que, con sus 39 años, tiene en su haber 41 reseñas de antecedentes que le llevaron a estar internado en prisión, donde protagonizó episodios violentos con los funcionarios del centro penitenciario.
Su nombre saltó a los titulares de la crónica de sucesos en el 2000 cuando secuestró a dos mujeres en su domicilio en la urbanización de Montecanal. Era un mes de agosto. El joven, tras robar un coche en la calle del Reino, asaltó un chalet de la citada urbanización donde intimidó a las dos mujeres que se encontraban en la vivienda para robar. Al conseguir un botín reducido se puso en contacto con el marido de una de las víctimas y exigió un rescate de dos millones de pesetas por no hacerles daño. Las mujeres fueron rescatadas tras permanecer varias horas atadas y el secuestrador fue detenido la tarde de ese mismo día cuando regresó al domicilio de las víctimas. Tras salir en libertad, Julián David Gracia fue detenido pocas semanas más tarde por el robo de un coche e ingresó en prisión preventiva.
En la actuación realizada ayer por la UAPO de la Policía Local, los agentes destacaron su agresividad y lo complicado que fue reducirle puesto que es una persona que en la actualidad está muy musculada. Una actitud que también mantuvo en los calabozos de la Jefatura Superior de Policía de Aragón. Hoy ha sido puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número 3 de Zaragoza como supuesto autor de un delito de lesiones graves y amenazas, siendo decretada la prisión provisional.
La mujer permanece en el hospital Materno-Infantil de la capital aragonesa, centro de referencia en la atención a víctimas de la violencia machista, donde está siendo atendida de las lesiones. Según fuentes consultadas, no había denuncias previas por malos tratos. La Unidad de Familia y Mujer (UFAM) de la Jefatura Superior de Policía de Aragón se hizo cargo del caso. El nivel de riesgo del sistema Viogén fue activado como alto.
