Después de varios años de investigación, la Guardia Civil de Huesca ha desarrollado una macrooperación contra el tráfico de marihuana sin precedentes en los últimos años en Aragón con una treintena de registros y más de medio centenar de detenidos. El dispositivo puesto en marcha se ha desarrollado en la provincia altoaragonesa, en Zaragoza y en Tarragona, pero también en Belgrado, capital serbia donde vivía el cabecilla de la supuesta organización criminal, que ha sido arrestado en esta ciudad.
El golpe policial ha desmantelado una banda que se había fijado en las zonas más rurales de la comunidad aragonesa, especialmente en viviendas y en naves industriales, donde cultivaban el cannabis con la intención de exportarlo a Europa. El modus operandi era siempre el mismo, el alquiler de las instalaciones para crear invernaderos de marihuana que se proveían de suministro eléctrico que defraudaban con conexiones ilegales a la red pública.
El operativo se desarrolló de manera simultánea a las 05.00 horas en una treintena de casas y naves industriales repartidas en localidades como Valls, Vila-Seca, Zaragoza capital, La Muela, El Burgo de Ebro, Cuarte de Huerva, Alcalá de Ebro, Utebo, San Mateo de Gállego, Zuera, Torralba de Ribota, entre otras. Esto obligó a movilizar hasta seis juzgados decanos para que activasen a sus respectivos secretarios judiciales y a la Guardia Civil que activó un gran número de efectivos como la Unidad de Seguridad Ciudadana, el Grupo de Acción Rápida de las comandancias del instituto armado de Zaragoza, Huesca, Tarragona y Gerona, apoyados por canes detectores de drogas, armas y dinero del Servicio Cinológico de la Guardia Civil. Asimismo, estuvieron apoyados por los Mossos d’Esquadra.
Plantaciones
El Equipo de Delincuencia Organizada y Antidrogas (EDOA) de la Guardia Civil de Huesca consiguió más de 10.000 plantas en diferente estadio de crecimiento, además de una importante cantidad de dinero que, por el momento no ha trascendido, ya que la operación dirigida por la titular del Juzgado de Instrucción y Primera Instancia número 2 de Huesca está bajo secreto de sumario.
Pero los agentes también se intervinieron otros mandatos que había marcado la magistrada como elementos para el cultivo, documentos con contabilidad, anotaciones y toda aquella prueba que pueda demostrar transformaciones en bienes, muebles o inmuebles que se hayan producido por la actividad del tráfico de drogas.
Por otro lado, solicitó la magistrada la intervención de todos los teléfonos móviles y demás aparatos electrónicos para que sea analizados por el Equipo de Investigación Tecnológica (Edite) del instituto armado. La operación continúa abierta. Todo apunta a que entre hoy y mañana sean puestos a disposición de la instructora. Los sospechosos, la mayoría de origen de serbio, aunque también hay rumanos y latinomericanos, están siendo investigados como supuestos autores de los delitos de tráfico de drogas, pertenencia a banda u organización criminal, defraudación de fluido eléctrico y blanqueo de capitales.
Aumentan los cultivos
Aragón está adquiriendo fuerza en el mercado ilegal de la marihuana tanto a nivel logístico como de producción. Cada vez son más las caravanas de hachís y de ‘maría’ que proceden del sur de España y que son intervenidas en su camino a Francia. Pero también destaca en producción de forma notable como consecuencia de los cambios en las preferencias de las personas que consumen drogas. El hecho de que haya desaparecido durante tantos meses el ocio nocturno como consecuencia de la pandemia ha provocando que las compras de cocaína o speed estén de capa caída en comparación contras sustancias menos sociales y con propiedades menos estimulantes.
Muestra de ello es que a los chalets convertidos en invernaderos de marihuana y a los bosques cuya frondosidad esconde plantas de cannabis se suman desde ahora naves de polígonos industriales que están de capa caída por la crisis económica. Una de las más importantes hasta la hecha en este 2021 fue la desarrollada por la Guardia Civil de Teruel que intervino más de cuatro toneladas de marihuana, en varias naves industriales situadas en la localidad de Villel (Teruel). Los agentes detuvieron a tres personas e investigado a más de una docena, como presuntos autores de varios delitos contra la salud pública y pertenencia a organización criminal.
Durante los registros de las naves industriales, los agentes hallaron cerca de 50.000 plantas de marihuana y una máquina industrial descogolladora empleada para separar de manera rápida los cogollos de las plantas. El cultivo de cáñamo está permitido exclusivamente destinado a fines industriales, es decir, aquellos cuyo destino sea la producción de fibra o semillas. También con autorización expresa de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), cuando se destina a fines científicos, médicos o de investigación.
