En la tarde del pasado domingo día 11, el Grupo de Rescate Especial de Intervención en Montaña (GREIM) de Benasque recibió dos avisos de rescate complicados. Uno de ellos, a última hora de la tarde, indicaba que unos montañeros que transitaban por la zona del Pico del Alba, habían escuchado a dos personas que les habían pedido ayuda ya que se encontraban enriscadas en la Cresta de los trece gendarmes, en el término municipal de Benasque y les era completamente imposible moverse de ese lugar. Finalmente el rescate duró 10 horas.

Y en el segundo, el 112 SOS-Aragón a través de la central 062 de la Guardia Civil de Huesca, informaba de que un escalador que se encontraba realizando un rapel en la vía del Pastor del Pico Forato (Panticosa) había caído al vacío, tras desprenderse una piedra, unos 60 metros, habiéndolo perdido de vista sus compañeros si bien podían escuchar que solicitaba ayuda.

En el primero, dadas las malas condiciones meteorológicas , tras una fuerte tormenta, y la proximidad del ocaso y al no poder hacer uso del helicóptero, efectivos del GREIM de Benasque salieron hacía la zona en vehículo oficial. 

Tras llegar hasta los Baños de Benasque continuaron a pie durante más de tres horas hasta la base de la pared, una vez allí pudieron establecer contacto visual con las luces frontales de los enriscados, comunicándose a voces con ellos y confirmando que se encontraban ilesos aunque con hipotermia. Tras ascender escalando unos 200 metros, por la pared mojada en un terreno descompuesto y abrupto, al llegar a la parte alta de la arista se desplazaron por la misma hasta llegar a la vertical de los enriscados y mediante maniobra de rapel lograron acceder a su posición, una vez asegurados y comprobado que se encontraban en buenas condiciones, iniciaron el descenso mediante rápeles, siendo asegurados en todo momento por los especialistas.

Una vez en la base de la pared continuaron el descenso caminando hasta enlazar con la ruta normal del Pico del Alba, siendo ya las 6.00 de la mañana, dadas las fuertes rachas de viento existentes en la zona se decidió descender todo lo posible, hasta un lugar donde el helicóptero pudiera recogerlos con seguridad, en las proximidades del Ibón del Alba.

Tras tres intentos de aproximación de la aeronave, dificultadas por las rachas de viento, por fin consiguió los pilotos consiguieron realizar un apoyo parcial y rápidamente se introdujo a los rescatados en la aeronave, siendo evacuados a la helisuperficie de Benasque a las 08.30 horas del día lunes. Los rescatados que resultaron ilesos y eran un varón de 26 años y una mujer de 46 años, ambos vecinos de Alicante.  

Caída al vacío

En el segundo rescate, en la vía del Pastor del Pico Forato (Panticosa), al lugar indicado se dirigieron el EREIM de Panticosa, el helicóptero de la Guardia Civil y la médico del 061. Y tras localizar al herido se determina que lo más rápido para acceder hasta él es mediante ciclos de grúa para dejar a los especialistas y la médico, resultando de gran dificultad debido a lo descompuesto de la roca, la inclinación del terreno y el viento reinante en la zona.

El herido se encontraba en una pequeña repisa inclinada, por lo que los especialistas tuvieron que montar una reunión en la que asegurar al herido, a la médico, ellos mismos y el material, para poder trabajar con seguridad, todo ello bajo una incesante caída de piedras debido a lo descompuesto de la pared. Una vez la médico consigue estabilizar al herido se le inmoviliza un brazo y una pierna mediante férula de vacío, momento en que comenzó a perder la conciencia por lo que se determinó hacer uso de la camilla para su evacuación. 

Con gran dificultad, dado el espacio reducido e inclinado en el que tuvieron que moverse los agentes, procedieron a descolgarlo unos 10 metros a un lugar más seguro para su evacuación. Tras conseguir descender la camilla se desencadenó una fuerte tormenta en el lugar de viento, granizo y rayos, teniendo que cubrir los especialistas al herido para evitar que le dañasen las piedras que constantemente caían arrastradas por el viento.

Sobre las 21.15 horas, una vez cesó la tormenta, el helicóptero pudo acudir a la zona y los pilotos, mediante un ciclo de grúa, consiguieron extraer la camilla a pesar del fuerte viento racheado que había en el lugar, informan desde la Guardia Civil de Huesca. Dada la peligrosidad de la maniobra el helicóptero evacuó al herido y la médico hasta Panticosa donde espera una ambulancia. El herido es un vecino de Barcelona de 56 años que fue trasladado en ambulancia al hospital Miguel Servet de Zaragoza.