Cuesta 10 euros y se llama "herramienta de distancia social" o "social distance zapper". Es una especie de llavero extensible que da una descarga eléctrica de 4.5 voltios a quien se acerca demasiado. Su fabricante, una empresa norteamericana de regalos, propone utilizarlo para hacer "cumplir de forma divertida con el distanciamiento social" impuesto por las restricciones del coronavirus. Se ha estado vendiendo, según ha comprobado CASO ABIERTO, el canal de investigación y sucesos de Prensa Ibérica, en páginas web y, hasta hace unos días, en grandes almacenes y tiendas de toda España.

Ese llavero eléctrico, que se vende en toda la Unión Europea, Estados Unidos y Canadá, pone en las manos de su dueño someter a pequeñas descargas eléctricas a quien considere que se salta la distancia social o la burbuja preventiva contra el covid. "Mantén a todo el mundo a una distancia segura", se anuncia. Cabe en un bolsillo (mide siete centímetros), pero es extensible y llega hasta los 63 centímetros, como una especie de bastón.

Menores y enfermos

Funciona a pilas y tiene un botón para activar la descarga eléctrica contra quien se aproxime más de la cuenta y provocarle una parálisis muscular temporal y localizada. Sus fabricantes advierten que no debe utilizarse contra menores de 14 años ni personas que padezcan patologías médicas.

CASO ABIERTO ha comprobado cómo esa herramienta se vendía aún esta semana en tiendas españolas y se ofrecía como "regalo original" para Navidad en páginas web de grandes almacenes y todo tipo de establecimientos. El martes, 30 de noviembre, ya estaba agotado en varios de ellos, que ofrecían a sus clientes, eso sí, la posibilidad de encargarlo para poder adquirirlo en unos días.

Anuncia en redes sociales de la "herramienta de distancia" que se vende en toda Europa.

"Da calambres"

Sin embargo, algunos de los centros comerciales donde se promocionaba y se vendía han comenzado a retirar esa herramienta de distancia social de sus ofertas navideñas. Un reportero de este canal quiso comprarla y le explicaron que el producto ya no estaba disponible porque "varios clientes se han quejado de que da calambres".

Esa decisión se ha producido después de que decenas de personas denunciaran, a través de sus redes sociales, la venta del producto en diferentes tiendas españolas: "No es Fake news o un montaje. Lo podéis comprar en la web", escribía la semana pasada un usuario en Twitter. Otro hombre le respondió: "Esto es un arma, denuncia a Consumo!!!".

Críticas de los negacionistas

El social distance zapper también ha generado críticas entre algunos negacionistas del covid, que estos días se expresan así en la red: "Venden implementos globalistas para que los covidianos den descargas a quien no respete distancia de seguridad. Lo que faltaba, temerosos y armados"; "venden porras eléctricas para guardar la distancia social, los asesinos creadores de la dictadura sanitaria van a por todas".

Aún sigue siendo posible comprar este polémico regalo navideño en diferentes portales web. En uno de ellos, se ofrecen las ventajas del producto con cierta ironía: "Algunas personas parecen no entender lo que son dos metros de distancia. Algunas personas solo necesitan electrocutarse ligeramente".

Otra oferta lo define como "herramienta telescópica de bolsillo" y defiende sus ventajas. Indica que "con una pequeña descarga eléctrica (zap) a cualquier idiota lo suficientemente tonto para entrar en tu espacio personal", ya no será necesario "entrar en una discusión inútil sobre covid 19 con un completo extraño. Solo, ¡ZAP!".