La moto que el hombre que ejecutó a Diego Ávila el Maradona utilizó para desplazarse antes y después del crimen se compró y utilizó exclusivamente para ese fin. Así lo refleja el escrito de acusación en el que la Fiscalía pide la prisión permanente revisable para los cuatro suecos acusados de asesinar a Ávila y Sofian Ahmed Barrak, conocido como el Zocato, y 12 años para otras cuatro personas que presuntamente dieron cobertura al grupo. El juicio tiene fecha para el mes de septiembre.

Ese apoyo, según el escrito, se centró en conseguir los vehículos con los que se ejecutaron o planificaron los crímenes, según el caso. En el primero, el rastro de la Yamaha T-MAX que empleó el verdugo del Maradona llevó a los investigadores de la Udyco-Costa del Sol hasta Alemania, donde fue adquirida el 14 de febrero de 2018 a través de una web germana dedicada a la compraventa de vehículos. La compradora, una de las procesadas como cómplice de asesinato, pagó 6.400 euros por el vehículo que fue recogido posteriormente por otros dos de los acusados en un concesionario que la marca japonesa tiene en Neuss, al este de Alemania. Lo hicieron en una furgoneta Mercedes Sprinter con matrícula sueca que uno de ellos había alquilado el mismo 14 de febrero en Heilsinborg (Suecia) por algo más de 5.000 euros. La acusación señala que la alquilaron con el único fin de transportar la moto desde Alemania hasta la Costa del Sol sin levantar sospechas por carretera y sin cumplimentar los trámites administrativos necesarios para ello.

Una vez que la moto fue entregada en Marbella al grupo liderado por Amir Mekky, la furgoneta fue devuelta por el arrendatario y su compañero de viaje a las 17.45 horas del 16 de febrero en la estación María Zambrano de la capital malagueña y ambos regresaron juntos a Suecia en un avión que hizo escala en la ciudad danesa de Copenhague.

David Ávila fue ejecutado a tiros ante su mujer, los dos hijos de ambos y un amigo del matrimonio cuando se subían al coche después de asistir a la primera comunión que uno de los menores hizo el 12 de mayo de ese año. La Udyco logró reconstruir el recorrido que el pistolero, identificado por los investigadores como Ahmad Abdul Karim, cubrió tras el crimen. Un trabajo de chinos que consistió en enlazar imágenes de cámaras de seguridad desde la calle Toledo, junto a la iglesia Virgen del Rocío de San Pedro Alcántara, hasta la urbanización Cortijo del Mar de Estepona en la que vivían los hermanos Mekky y Abdul Karim. Los agentes encontraron la misma moto utilizada en el crimen el 18 de mayo en el garaje comunitario del residencial y, según la investigación, fue utilizada «única y exclusivamente» para cometer el crimen.

El Zocato fue asesinado en la zona de El Campanario de Estepona el 20 de agosto en la puerta de su casa por un hombre (la policía también señala a Ahmad) que huyó en una bicicleta que fue encontrada entre unos arbustos cerca de la misma urbanización, situada a escasos 500 metros del lugar del crimen. En este caso, la acusación determina que los principales imputados contaron con la ayuda previa de una cuarta persona. El escrito detalla que este hombre proporcionó su identidad y otros datos personales para el alquilar un Peugeot 208 que la banda usó «únicamente» para realizar labores de vigilancia y planificación del crimen, aunque también se acusa a esta persona de ayudarles a ocultar y arrojar a la basura una bolsa que contenía dispositivos electrónicos y geolocalizadores que los primeros usaron durante la preparación.