El hombre de 83 años que durante la tarde de ayer miércoles asesinó a puñaladas a su esposa en el interior de una vivienda de Los Cristianos, en el municipio de Arona (Tenerife), fue durante años un maltratador habitual. Sin embargo, no le constaban antecedentes policiales ni judiciales por violencia de género, ni constaba en ninguna base oficial, puesto que la víctima nunca se decidió a denunciarlo.

Aunque en un primer momento trascendió como posible detonante del crimen machista, las fuentes consultadas explican que es mentira que el individuo sufriera algún tipo de enfermedad terminal y que eso le llevara a acabar con la vida de su pareja. Sí consta que podría ser una persona hipocondríaca, pero que solo tenía patologías asociadas a su edad.

En cualquier caso, dicha circunstancia de salud no puede considerarse justificación alguna para perpetrar un crimen de estas características, como explican algunas fuentes consultadas.

El varón, identificado como Ángel Martínez, es el que figuraba en el buzón de la vivienda en la que ocurrieron los hechos. Clotilde Rodríguez, de 82 años, falleció después de recibir varias puñaladas. Ambos eran naturales de Vigo. Tras matar a su esposa, el octogenario se realizó diversos cortes de arma blanca, con la intención de quitarse la vida o, al menos, de simularlo.

Personas del entorno del matrimonio admiten que, con relativa frecuencia, Clotilde sufría malos tratos físicos y psicológicos. En la zona en la que ocurrió el asesinato, varias personas explicaron que a Ángel "se le iba la cabeza" en algunas ocasiones.

El presunto autor del asesinato todavía sigue ingresado en un centro hospitalario, aunque, en principio, no se teme por su vida. Además, permanece custodiado por agentes de la Policía Nacional, ya que, desde que el personal médico lo considere oportuno, se le leerán los derechos y se le comunicará de forma oficial que está detenido por un delito de homicidio doloso.

Ambos pasaban largas temporadas de vacaciones en Los Cristianos. De forma concreta, vivían en un apartamento en el edificio Pepita, en el número 37 de la Avenida de Los Playeros. Esta vía peatonal se halla en pleno centro del número de Los Cristianos, muy cerca de la plaza de la iglesia de Nuestra Señora del Carmen.

Según explican vecinos y personas de la zona, Clotilde apenas salía de la vivienda por circunstancias que se desconocen. Y algunas personas que trabajan en la Avenida de Los Playeros solo la recuerdan asomada al balcón del apartamento.

En la mañana de este jueves se le realiza la autopsia a la octogenaria en el Instituto de Medicina Legal de Santa Cruz de Tenerife, donde se determinará la causa real de la muerte, así como si la víctima sufrió ensañamiento por parte del hombre o no.

La investigación de este asunto, como suele ser habitual en estos casos, ha sido asumida por la Unidad de Familia Mujer (UFAM) de la Brigada de Policía Judicial de la Policía Nacional de la Comisaría del Sur de Tenerife.