Un vídeo íntimo de una de las víctimas, totalmente ajeno a la violación grupal y del cual tuvo conocimiento la jueza a última hora porque lo aportó el abogado de uno de los presuntos violadores es, según el entorno del letrado, la clave que llevó a la magistrada a cambiar de opinión en el último momento y adoptar la libertad de los cinco menores detenidos por la presunta violación grupal cuando ya había informado de que iba a internarlos.

Así lo consideran algunas fuentes consultadas por este periódico, quienes atribuyen la entrega del vídeo a una maniobra de uno de los letrados, ya que aportó ese material una vez que la fiscal ya había solicitado el internamiento para cuatro de los presuntos agresores sexuales.

Aunque la jueza se negó a ver el vídeo y no hace referencia alguna al mismo en los autos de libertad, estas mismas fuentes señalan que la secretaria judicial y una funcionaria sí lo habrían visto y lo habrían transmitido su contenido.

Un grito desgarrador

Otras fuentes por el contrario consideran que ese vídeo, que no es del día de los hechos ni fue tomado en el lugar de la agresión, no tiene nada que ver con la decisión de la jueza, quien incluso recriminó al letrado que quisiera hacérselo ver en un móvil y le instó a que lo aportara de forma procedente si lo consideraba relevante.

En todo caso, se trata de un vídeo íntimo de una de las menores, completamente ajeno a los hechos denunciados y cuya aportación únicamente busca desvirtuarla como víctima, cuando realmente no guarda relación con el ataque sexual en manada. El abogado tampoco ha indicado cómo ha obtenido ese vídeo y si alguien obligó a la chica a compartirlo con alguno de los acusados.

El vídeo que sí tiene relación con los hechos fue grabado precisamente por una de las niñas a escondidas en la casa, y en esas imágenes, de corta duración, se escucha el grito desgarrador de una de ellas, que deja a las claras lo sucedido. Sin embargo, ese vídeo, aportado en el atestado policial, tampoco aparece reflejado en los autos en los que la jueza justifica el no internamiento de los acusados.