La Guardia Civil investiga como delito un accidente en Aragón en el que un bulldozer impactó contra un puente

Los hechos sucedieron en noviembre en Villafranca de Ebro

El Bulldozer atascado.

El Bulldozer atascado. / GUARDIA CIVIL

El Periódico de Aragón

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Zaragoza

La Unidad de Investigación de Seguridad Vial (UNIS) de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil de Zaragoza ha abierto una investigación penal a un conductor de un transporte especial y a la gestora de la empresa por un presunto delito contra la seguridad vial por un accidente ocurrido en noviembre en la AP-2.

El incidente tuvo lugar el 25 de noviembre de 2024 en el kilómetro 24,250 de la AP-2, en el término municipal de Villafranca de Ebro, cuando un vehículo de transporte especial, que trasladaba un Bulldozer, impactó contra un puente y quedó encajada su carga lo que supuso un peligroso obstáculo en la vía, informa el instituto armado en una nota de prensa.

En la intervención participaron patrullas del Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil de Alfajarín, que dieron traslado del vehículo a un área de descanso próxima. Durante la inspección, los agentes detectaron diversas irregularidades en el transporte, lo que motivó la intervención de la UNIS de Zaragoza.

La investigación posterior reveló que el vehículo carecía de la autorización necesaria para circular por la AP-2 con una altura de 4,75 metros y, además, incumplía otras normativas, como la exigencia de dos vehículos piloto en lugar de uno y la falta de una correcta señalización de la anchura de la carga.

El informe pericial determinó que el principal factor del siniestro fue la decisión de la empresa de permitir la circulación del transporte especial sin la autorización correspondiente, lo que derivó en el impacto contra un puente con una altura máxima de 4,69 metros, un negligencia que generó un obstáculo imprevisible y un grave riesgo para el resto de usuarios de la vía.

Por estos hechos, la UNIS de Zaragoza ha procedido a la investigación de la gestora de transportes de la empresa, una mujer de 48 años, y del conductor del vehículo, un varón de 36 años, por un supuesto delito contra la Seguridad Vial según el artículo 385 del Código Penal, relativo a la generación de un grave riesgo para la circulación.

La Guardia Civil recuerda que este tipo de conductas ponen en peligro la seguridad de conductores y usuarios de la vía, motivo por el que el instituto armado refuerza sus investigaciones para evitar siniestros similares y garantizar el cumplimiento de la normativa de transporte especial.

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