Una mujer acude a las Urgencias del Clínico con un hacha para matar a su marido

Por el servicio de Urgencias de los centros hospitalarios desfilan numerosos pacientes con cuadros médicos de mayor o menor entidad que les hacen tener más o menos paciencia mientras se prolonga el turno para ser atendidos. Con cierta frecuencia, los tiempos de espera derivan en problemas de convivencia con la sucesión de improperios dirigidos hacia los profesionales sanitarios e incluso episodios de violencia que obligan a intervenir a los vigilantes de seguridad. Pero, en otras ocasiones, estos cuadros nada tienen que ver con largas esperas y se traducen en situaciones sorprendentes que no dejan indiferente a nadie. Así sucedió este pasado sábado por la mañana cuando una mujer de 39 años accedió armada con un hacha y un punzón a las Urgencias del hospital Clínico Universitario Lozano Blesa de Zaragoza. Y es que, según ha podido saber EL PERIÓDICO DE ARAGÓN, lo hizo para matar a su marido.

Los hechos referidos se remontan a la primera hora de la mañana del pasado 8 de febrero, en torno a las 08.00 horas, cuando la mujer intentó acceder al hospital por la entrada principal. Su intención era visitar las Urgencias del citado centro hospitalario, de ahí que se le indicara que la forma de hacerlo era a través de la entrada trasera, un requerimiento al que accedió no sin antes recibir varias indicaciones para que así lo hiciera. Al final aceptó mientras expresaba las intenciones de matar a su marido.

Ya en el triaje, los vigilantes de seguridad registraron el bolso que portaba la mujer y en su interior descubrieron un hacha de grandes dimensiones y un punzón que le requisaron y que entregaron a la Policía. Y es que de todo ello se dio aviso a la sala de emergencias del 091, que comisionó hasta allí a una dotación de la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Jefatura Superior de Policía de Aragón para hacerse cargo de los efectivos intervenidos sin que finalmente detuvieran a la mujer. Al parecer, fue atendida in situ por un psiquiatra y derivada posteriormente al hospital Royo Villanova.

Se da la coincidencia de que, a finales del año pasado, una paciente de Urgencias del mismo centro hospitalario increpó a los sanitarios y amenazó con un cuchillo de grandes dimensiones a los vigilantes. Los miembros del personal de seguridad lograron reducir a la paciente, la engrilletaron y la dejaron hospitalizada en la sala de observación a la espera de ser atendida por los profesionales del área de psiquiatría.