Condenado por tocarle los pechos a una niña en el Parque de Atracciones de Zaragoza

Tocarle los pechos a la hija de la mejor amiga de su pareja en el Parque de Atracciones de Zaragoza le ha costado un año de cárcel a Byron Amílcar D. P. (Nicaragua, 1982). Así lo recoge la sentencia que ha firmado la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Zaragoza en relación a unos hechos que tuvieron lugar el mediodía del 1 de septiembre de 2024 con motivo de la fiesta en honor a la independencia de Nicaragua que se celebraba en este recinto recreativo de la capital aragonesa. Fue la respuesta del ahora condenado una vez que sujetó por el hombro a la menor para que no se levantara de la mesa de tal modo que, cuando se echó hacia atrás, Byron Amílcar D. P. deslizó su mano por el pecho tocándole ambos senos "con intención libidinosa".

El fallo también recoge el pago de 1.000 euros a la víctima además de dos años de inhabilitación para desempeñar cualquier profesión, oficio o actividad que conlleve un contacto regular y directo con menores de edad. Y además continúa vigente la orden de alejamiento de 200 metros en favor de la víctima, la cual se mantendrá vigente a lo largo de los próximos dos años de la mano también de una prohibición de comunicación por el mismo periodo de tiempo.

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"Es factible considerar el relato de la menor como creíble, verosímil y persistente, viniendo corroborado periféricamente por las testificales indicadas y analizadas", argumenta el tribunal provincial presidido por el magistrado Mauricio Murillo, en alusión a la declaración de la propia víctima, que fue reproducida en el juicio como prueba preconstituida, y de los testigos de este mismo episodio. "Debe tenerse en cuenta la declaración prestada por la menor en sede judicial, que es clara, tajante y concisa al respecto, llegando a ponerse a llorar en el momento en que relata el suceso", prosigue la Sala.

Tres antecedentes

Su currículum delictivo contabiliza tres antecedentes y su situación administrativa en territorio nacional es irregular hasta el punto de que la Subdelegación del Gobierno en la provincia de Zaragoza emitió en 2022 una orden de expulsión. Entre sus detenciones previas figuran delitos de violencia de género, malos tratos y apropiación indebida.

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Mientras que el ministerio fiscal solicitaba inicialmente una pena de tres años de cárcel por un delito de agresión sexual, la acusación particular a cargo del abogado David Reguero eleva la pena privativa de libertad hasta los cinco años. Su abogada defensora, la letrada Carmen Sánchez Herrero, defendió su inocencia y alternativamente planteó una condena por un delito leve de coacciones. La causa la ha dirigido el Juzgado de Instrucción número 12 de Zaragoza.