Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

Un saqueo histórico en el cementerio de Torrero para 'ganar' 3.586 euros

El propietario de una chatarrería de la carretera Logroño efectuó nueve compras a dos de los tres detenidos entre el 13 de septiembre y 10 de octubre

Ya hay tres detenidos por vandalizar 500 nichos en el cementerio de Torrero

POLICÍA NACIONAL

Zaragoza

Son once albaranes. El primero está fechado el 13 de septiembre de 2025, y el último, el 10 de octubre. Los justifica Optimus Reciclaje SL, una chatarrería de la carretera Logroño. La cuantía más elevada se sitúa en 704 euros por 220 unidades de latón cuyo precio unitario se fija en 3,20 euros. En otros albaranes también se referencia como concepto "chatarra" a un precio de 0,16 euros la unidad según la información a la que ha tenido acceso este diario. De esta forma se catalogaron los cristos, las vírgenes y las esculturas que la Policía intervino en una planta de reciclaje del polígono Centrovía. Allí iba a terminar el tortuoso camino de estos bienes, aunque para fortuna del Grupo de Robos, el material todavía no se había clasificado y permanecía en dos sacas.

Es una información que el propietario de Optimus Reciclaje SL facilitó al Grupo de Robos cuando le preguntaron por las compras que realizó a I. G. G. -fueron nueve operaciones- y a T. M. G. (2). En el primer albarán, el del 13 de septiembre, se reseña un precio de 99,20 euros por 27,5 unidades de latón (88 euros) y otras 70 de chatarra (11,20). La siguiente operación se cerró dos días después. El 15 de septiembre consta una compra de 87 unidades de latón que elevó la factura hasta las 269,70 euros.

Los precios

En septiembre solo se realizó una operación más, el día 27 por valor de 196,82 euros, hasta que a lo largo del mes de octubre, los días 2, 4, 6, 7, 8, 9 y 10, se cerraron ocho compras cuyos importes oscilaron entre los 102 y los 704 euros. Son las fechas en las que la Policía percibió un aumento "exponencial" de los robos y de los daños en el camposanto zaragozano hasta que el día 17 se les detuvo junto a M. C. S. en sus domicilios del Oliver. En una de sus calles se había localizado días antes la furgoneta, una Renault Express, con la que se desplazaban hasta el cementerio y hasta la chatarrería.

Tanto es así que las cámaras captaron cómo llegaban I. G. G. y T. M. G. a las instalaciones de la carretera Logroño, cuyo propietario, el chino J. P., consta como investigado por un delito de receptación. Es decir, que hubiera comprado el material a sabiendas de que lo habían robado. Por eso se le interrogó la tarde del 17 de octubre en la Jefatura Superior de Policía, donde estuvo asistido de su abogado, el letrado Ignacio Pérez Bailón. Entonces relató que los vendedores le habían asegurado que el material procedía del trabajo de I. G. G. sin que nunca le hubiera preguntado dónde trabajaban. Sí que no sabía nada del tercero de los detenidos, M. C. S., quien aseguró que solo realizaba labores de vigilancias en el cementerio.

Tracking Pixel Contents