Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

Vecinos de la mujer asesinada en Zaragoza por su pareja: "Estaba amenazada de muerte"

Una mujer explica que cobijó a la víctima en su hogar tras una "fuerte" pelea con el detenido

Vecinos de la mujer asesinada en Zaragoza por su pareja: “Estaba amenazada de muerte”

Jaime Galindo

Zaragoza

Carmen volvía de acompañar a sus hijas al colegio. Como cualquier día, vaya. Pero jamás podría haber imaginado que a su regreso a casa, al número 23 de la calle Privilegio de la Unión, Abel habría cumplido ya la amenaza de asesinar a su pareja Eugenia Mercedes, esa mujer a la que Carmen le había dado cobijo en su hogar a cuenta de otros enfrentamientos anteriores. Dice esta vecina que es "un horror", que está conmocionada y que todavía no asimila el fallecimiento de "una persona muy buena y muy amable". No puede decir lo mismo de Abel, un varón "muy celoso" del que bien conocía su personalidad por lo que le contaba la fallecida.

"Una pelea anterior a esta fue tan fuerte que le rompió el móvil, se fue a la parada y me la encontré yo. Me la llevé a mi casa, durmió en mi casa, estuvimos hablando hasta las tantas de la mañana y una de las cosas que me dijo era que le daba miedo vivir con él y que estaba amenazada de muerte. Mi marido le dijo que intentasen convivir e hiciesen las paces, pero no pensábamos que se iba a llegar hasta este extremo, nadie cree que una pareja vaya a hacer esto", ha contado esta mujer desde la puerta de su piso, a escasos metros de la escena del crimen, perpetrado en el 2ºC.

Sobre este episodio ha recordado que fue "hace mucho" pero que, eso sí, tuvo lugar este mismo año en este edificio del barrio San José. Allí residía Abel desde hacía unos tres años y hasta allí se mudó Eugenia cuando entabló una relación sentimental con él. Vivían "juntos". Sobre la difunta ha explicado que trabaja en "una panadería" en el centro de la ciudad y duda de si Abel trabajaba a día de hoy. De la edad de la víctima, de hecho, se ha enterado por lo publicado en los medios de comunicación.

No hay consuelo para Carmen, a quien su marido le ha comunicado lo sucedido cuando ha regresado a casa. "No me hubiera gustado que lo hubiesen escuchado mis hijos", ha afirmado esta mujer. Y es que no ha sido un martes cualquiera, muy lejos de lo que imaginaba cuando ha salido de casa para llevar a sus hijos al colegio.

Tracking Pixel Contents