El magistrado del Juzgado de Instrucción 3 de Teruel ha condenado a un hombre a 360 euros de multa --dos meses con una cuota diaria de seis euros-- por un delito leve de maltrato de obra sin causar lesión, con la agravante de odio por motivos de orientación o identidad sexual. El acusado se mofaba de la condición de homosexual de su víctima.

Además, le condena a sufrir un día de privación de libertad, debiendo cumplimentarse en prisión, por cada dos días multa que no pague y a una orden de alejamiento de la víctima, con prohibición de comunicación.

Así, el acusado no podrá acercarse a la víctima a menos de cien metros, ni de su domicilio, lugar de trabajo o estudios, y lugares que frecuente, ni comunicarse con él por cualquier medio, sea informático, telefónico, telegráfico, por carta o cualquier otra vía posible por un plazo de seis meses.

Los hechos ocurrieron el pasado 18 de febrero, en Teruel, en un pub de la capital turolense, cuando este individuo se mofó de la condición de homosexual de un joven porque iba con los ojos, labios y uñas pintadas, y vestía botas de tacón, mientras le tiraba de las trenzas.

Le tiró de las trenzas y le dio un puñetazo

Todo sucedió sobre las 04.45 horas de ese día. La sentencia explica que, tras tirarle de las trenzas, este hombre incrementó su agresividad contra el joven, profiriendo expresiones intimidatorias, para, finalmente, propinarle un puñetazo en la frente, tirándolo al suelo.

El agredido no precisó de asistencia médica alguna y renunció a cualquier tipo de indemnización económica que pudiere corresponderle, mientras que el denunciado reconoció los hechos en sede judicial y pidió disculpas públicas "por su deplorable y lamentable comportamiento".

Contra el fallo, cuya sentencia está firmada este viernes, 25 de febrero, puede interponerse un recurso de apelación ante la Audiencia Provincial de Teruel, en el plazo de cinco días desde su notificación.