El Ayuntamiento de Teruel ha comenzado este viernes con los trabajos en la plaza del Torico para reponer la columna que se vino abajo hace dos semanas. A partir de las 08.00 horas los operarios han comenzado a ensamblar las piezas bajo la mirada de muchos turolenses.
La alcaldesa de Teruel, Emma Buj, ha explicado que el montaje de la columna ha tenido que hacerse en dos ocasiones. "La primera ha sido de prueba y cuando hemos visto que ya todo encajaba se ha retirado para poder colocar la masa de cal y sílice que junto a las cuatro barras sujeta la columna", ha explicado la primera edil. Además, la columna también llevara tres barras de fibra de vidrio, "el material más resistente que existe", ha confirmado Buj.
En torno a las 13.00 horas los operarios han colocado el capitel, la parte final de la columna del monumento al Torico, momento en el que los turolenses que se encontraban en la plaza han estallado en aplausos.
Por otro lado, el molde que servirá para realizar el gemelo de bronce ya está listo. Después de realizar pruebas con diferentes materiales, se espera que en breve se pueda realizar la fundición a partir de la cual se conseguirá la replica que se colocará en lo alto de la columna durante las fiestas del Ángel.
Según la alcaldesa, si no hay imprevistos la colocación del gemelo de bronce podría realizarse el próximo miércoles. "Yo misma me desplazaré a Zaragoza a recoger tanto el original como el gemelo para traerlos a Teruel y colocarlos", ha confirmado Buj.
La primera edil explicó también que durante estos días ha estado manteniendo conversaciones con la directora general de Patrimonio, Marisancho Menjón, y aseguró que ambas coinciden en que "si el Torico que se coloque no es original ya no le afectan las cuestiones que tienen que ver con Patrimonio". Además, el consistorio tendrá que remitir los documentos que justifiquen que la columna no sufrirá daños cuando se coloque el pañuelico. "Es una cuestión fácil de justificar porque ya son varios los expertos que nos han confirmado que la columna no sufre daños porque los peñistas suben agarrados a la espalda de otros compañeros", explicó la alcaldesa.
No es la primera vez que el toro desciende de su sitio, también fue apeado durante la guerra civil para protegerlo. En la biblioteca Nacional se conservan dos álbumes con fotografías de febrero de 1938 en el momento en que se dio por terminada la llamada Batalla de Teruel, donde aparece el monumento apuntalado, con visibles desperfectos en la base y el Torico apeado bajo ella listo para ser reinstalado.
Tras el examen de las fracturas del Torico se ha visto que no era de bronce como se creía, sino de hierro.
