El nuevo Torico acaba de llegar a Teruel, donde va a ser presentado en el salón de plenos del consistorio turolense. La réplica, con un peso de 35 kilos y de bronce, ha partido de Zaragoza sobre las once de la mañana y se colocará mañana en su columna a partir de las 8 horas. Ha sido el concejal de Fiestas, Javier Domingo, quien se ha encargado de ir a buscarla personalmente.
La alcaldesa de Teruel, Emma Buj, ha recalcado la importancia del Torico como un símbolo para todos los turolenses y mantiene la posibilidad de que esta réplica permanezca definitivamente en lo más alto: "Tenemos que decidir si el Torico restaurado se queda en dependencias municipales para su exposición y este se mantiene en el pedestal o volvemos a cambiarlos". Se decidió que fuera en bronce "ante la previsión de que fuera el que se quedara finalmente en la plaza del Torico", ya que se trata de un material noble más resistente.
Se trata del último paso previo para que la plaza del Torico recupere su aspecto habitual tras los trabajos en la reparación de la columna que se iniciaron ya el pasado viernes.
Emma Buj, explicó entonces que el montaje tuvo que hacerse en dos veces porque la primera, de prueba, fue una forma de asegurarse que todo encajaba: "Cuando hemos visto que ya todo encajaba se ha retirado para poder colocar la masa de cal y sílice que junto a las cuatro barras sujeta la columna".
Apenas han pasado dos semanas desde que Teruel amaneciera con la icónica fuente del Torico por lo suelos, que se derrumbó durante los trabajos de retirada de las 23 cuerdas empleadas durante la celebración del Congreso Nacional del Toro de Cuerda.
No es la primera vez que el toro desciende de su sitio, también fue apeado durante la guerra civil para protegerlo. En la biblioteca Nacional se conservan dos álbumes con fotografías de febrero de 1938 en el momento en que se dio por terminada la llamada Batalla de Teruel, donde aparece el monumento apuntalado, con visibles desperfectos en la base y el Torico apeado bajo ella listo para ser reinstalado.
Tras el examen de las fracturas del Torico se ha visto que no era de bronce como se creía, sino de hierro.
