El pelo es una de las ventanas al exterior más claras, visibles y que más dicen de nosotros. Aunque a veces las apariencias engañan, por el peinado puedes intuir cómo es una persona, su trabajo e incluso sus aficiones. Todos los cabellos necesitan unos cuidados para que gocen de una buena salud, pero a veces se secan, se dañan o se cae más de la cuenta.

Uno de los grandes problemas es que nuestro pelo está totalmente expuesto a todos los agentes externos. Si hay humedad, afecta. Si hace un sol extremo, también incide. También otros factores como la contaminación, el clima o nuestro estilo de vida pueden afectar a nuestra salud capilar, por lo que aquí van unos cuantos consejos para mantenerlo cuidado e hidratado.

Tips para un pelo radiante

El primer consejo quizá es un poco contradictorio, pero no te lo laves todos los días. El motivo es que los champús tienen muchos agentes químicos que pueden alterar los aceites naturales del cabello e incluso debilitarlo. Sí, perderá brillo, pero no es aconsejable lavarlo todos los días. En jornadas alternas o incluso tres días es lo ideal.

En el artículo que te dejamos justo encima también te hablamos del uso del acondicionador, que es muy recomendable utilizarlo en cada lavado por sus propiedades para hidratar el cabello y además ayudar con los enredos. En cuanto a la mascarilla, reduce su frecuencia a una vez por semana.

Pero todavía no hemos entrado de lleno en el champú. Y como habrás podido imaginar, en el mercado hay muchísimos que están especialmente pensados y probados para hidratar el cabello e incluso con la etiqueta bien clara de que sirven para el cabello seco y dañado, así que utilízalos.

Cuidado con el calor

Como es lógico, para evitar que un pelo se seque en exceso hay que evitar fuentes de calor potente. Por eso hay que tener precaución con la incidencia directa del sol, tanto por nuestro pelo como porque el cuero cabelludo puede llegar a quemarse y causarnos problemas en la piel. Sobre todo en verano trata de protegerlo e incluso taparlo con gorras o sombreros.

Y algunos aparatos que tenemos en casa tampoco escapan. Es el caso de los secadores de pelo y las planchas para alisar. De vez en cuando y con mucho cuidado no deberían de ser muy perjudiciales, pero hay que tener mucho cuidado con ellos.

Por último, aliméntate bien, que también tiene su incidencia. Si nuestro cuerpo está debidamente hidratado a través del agua u otros alimentos nuestro pelo por supuesto que lo notará, e intenta no tener mucho tiempo el pelo recogido de forma muy tensa, porque afectará a la elasticidad del cabello.