Es posible que no lo sepas, pero la diabetes no solo afecta a los humanos, también a los animales. Este domingo se celebra el Día Mundial de esta enfermedad crónica y, si bien entre las personas es sencilla de detectar, en nuestras mascotas sucede todo lo contrario. Muchas veces pensamos qué le pasa a nuestro perro o gato y no tenemos una respuesta clara.

La estimación es que uno de cada 300 perros y gatos la padecen y es necesario ponerse pronto manos a la obra para detectarla y, sobre todo, cuidar a nuestro animal mediante una dieta y hábitos saludables.

Jaume Fatjó, doctor en Veterinaria por la Universidad Autónoma de Barcelona y especialista europeo certificado en Medicina del Comportamiento de los Animales de Compañía por el European College of Animal Welfare and Behavioral Medicine, en el programa ‘Con V de Vet’ de MSD Animal Health, asegura que hay dos factores que influyen en la diabetes animal.

"Tal y como sucede con las personas, la diabetes tiene dos factores de riesgo importantes: la edad y la obesidad. No podemos hacer nada, por desgracia, para evitar la llegada del primero, pero sí del segundo. Mantener un adecuado peso corporal a través de una dieta sana y equilibrada, así como un adecuado nivel de actividad física, son las claves para prevenir la diabetes y muchas otras enfermedades”, resalta.

Los comportamientos

Por eso, tal y como apunta, es necesario fijarse en el comportamiento de las mascotas, que nos pueden dar pistas sobre si sufren de diabetes o no. Uno de los más comunes es que aumenta considerablemente el consumo de agua.

Además, también suele ir ligado un aumento de la comida ingerida y, sobre todo, lo que más suele marcar a los dueños es que tienen muchos cambios de humor y que se muestran más irritables de lo habitual porque no se encuentran bien.

"Por ejemplo, si hablamos de los gatos, son muy útiles los comederos y bebederos inteligentes, porque pueden informarnos de cambios en el consumo de alimentos y de agua que, de otro modo, podrían pasar desapercibidos", comenta el experto.

Como en el caso de los humanos, la insulina juega un papel fundamental en el control de los síntomas de la diabetes en mascotas, así como en la normalización de los altos niveles de glucosa en sangre. Administrando la insulina correctamente se puede lograr que los animales recuperen su calidad de vida.