La pasta de dientes está concebida para la higiene bucal. Hasta aquí, una obviedad más bien evitable. Pero a veces por casualidad y otras veces queriendo por los productos químicos que tiene en su interior, se destapa como un potente agente limpiador. ¿Acaso cuando inventaron la Coca Cola sabían que iba a ser ideal contra el óxido de las monedas? Esas casualidades que tiene la vida.

Aunque para algunas cosas de la lista hay productos específicos, la pasta de dientes te puede sacar de más de un apuro y mostrarse muy eficaz. Pruébala y compruébalo por ti mismo.

Limpiar la pantalla del móvil

Es especialmente útil cuando hay pequeños roces. Pon en un paño húmedo un poco de pasta de dientes, frota, déjalo secar y acto seguido retira cualquier resto. Verás cómo se queda de limpio.

La pantalla del móvil quedará limpia.

Manchas en la plancha

Más que para una limpieza general es apta para las quemaduras y las partes más oscuras. Aplica la pasta de dientes sobre la superficie fría y déjalo actuar antes de retirar.

Eliminar arañazos en el cuero

Anda que no fastidia encontrar uno en el sofá, porque además que sea de cuero es indicativo de que es bueno. Echa un poco de pasta de dientes y frota por la zona más castigada. Después retira con un paño húmedo y listo.

Limpiar el horno

Ya te habíamos contado el producto que tiene Mercadona para ello, pero si es un domingo y no tienes o prefieres un remedio casero vuelve a aplicar la misma fórmula: pasta de dientes, paño húmedo y retirar.

Es especialmente eficaz para el cuero.

Quitar el mal olor del cubo de basura

Generalmente todos usamos bolsa, pero a veces es normal que algo escurra o que se salga de ella y acabe en el cubo. Si ha cogido mal olor, aplica pasta de dientes en una esponja húmeda y pásala por la superficie.

Paredes limpias

El borrador mágico que puedes encontrar en Amazon es una enorme opción para ello, pero si no quieres usarlo puedes echar directamente la pasta de dientes sobre la zona a limpiar.

Otros usos

La lista es prácticamente interminable, por lo que te dejamos otros usos, que son sacar brillo a las teclas del piano, quitar los restos de los vasos que han rebosado o sudado de los muebles de madera (eso pasa por no usar posavasos) o abrillantar la cubertería, sobre todo si siempre se limpia a mano y no con lavavajillas.