La Navidad se acerca irremediablemente y con ella uno de los momentos más especiales y bonitos, ya que llega la hora de decorar el hogar con el árbol, el belén, los adornos y todo eso con un sinfín de posibilidades.

Precisamente esa gran variedad es la que propicia que cada año las tendencias cambien. Por supuesto, hay tonos que jamás van a fallar y que nunca pasarán de moda, como por ejemplo el rojo, que es el color por excelencia de la Navidad, pero si quieres sorprenderte y sorprender hay otras alternativas que quedarán espectaculares y que serán de revista.

Y aunque todavía queden unas semanas, puedes ir pensando ya en cómo quieres decorar tu casa para estas Navidades, cogiendo ideas, buscando productos si así lo deseas, para que cuando llegue el día esté todo espectacular.

Los clásicos de siempre

Si no tienes mucha experiencia decorando o en otros años has optado por opciones más rompedoras volver al rojo clásico de la Navidad es jugar sobre seguro y tener bien claro que no se va a fallar. Velas, coronas, las bolas del árbol, las luces, el espumillón, el mantel... todo sirve para una decoración navideña sencilla, pero preciosa.

Si todo ello se combina con las fundas de los cojines o incluso el color de los papeles que envuelven los regalos seguro que disfrutarás y notarás un ambiente muy cálido y especial.

Otra opción que también se va a llevar muchísimo esta Navidad y que también es, en cierto modo, bastante clásica, es utilizar los tonos dorados u oro y muy brillantes. Sobre todo si tienes un salón de tonos muy claros y neutros, como por ejemplo blanco, beige o caqui, lucirá espectacular y la variedad también es muy amplia.

Los tonos dorados no pasan de moda. Freepik

De hecho, en este caso una gran recomendación es combinarlos con otros elementos que sean blancos. Con una alfombra de ese color bajo el árbol, elementos que simulen la nieve en el árbol y bolas y decoraciones de ese color también es sencillo, elegante y muy navideño.

Morado, lo más rompedor

Pero este año, si quieres sorprender de verdad, el morado es tu opción sin duda alguna. Por supuesto, varía entre los tonos más claros y los más oscuros y con el resto de elementos que le pueden dar un montón de vida a tu estancia como los regalos, la propia alfombra, lo que pongas en el árbol, las luces, lo que escojas para la mesa...

Con el morado te sorprenderás. Amazon

Ahora bien, para ello lo mejor es que tengas los colores de las paredes y los muebles, como ya te hemos contado antes, con colores neutros y, a ser posible, que haya muy pocos elementos oscuros, ya que no pegarán mucho.