A la hora de cuidar los suelos de casa hay muchas opciones distintas y cada vez más alternativas. Para quitar la suciedad superficial y más sólida se puede optar por una escoba, por una mopa, por un aspirador de los de toda la vida o la última tendencia, que son los robots aspiradores, que lo hacen todo de forma autónoma y que quitan muchísimo trabajo.
Pero luego hay que darle un repaso a los suelos y fregarlos. Entonces, salvo que se tenga un robot aspirador que además friegue el suelo (que existen, aunque también son menos económicos y resultará una inversión considerable), hay que optar por una fregona.
Para fregar el suelo no solo hay que atinar con la fregona que se va a usar, porque hay varios materiales, sino además escoger qué tipo de producto usar para que no haya ni un resto de suciedad. Ahí entran en juego los remedios caseros de toda la vida, los jabones o, por supuesto, la lejía o los friegasuelos que ya vienen preparados y aromatizados.
Material resistente
El caso es que se puede optar por la clásica fregona de toda la vida, con tiras de colores (generalmente amarillas, verdes o rosas), pero hay otro material que se está imponiendo y no solo en las fregonas, ya que también están ganando la partida en las bayetas y es la microfibra.
Es muy resistente, posee un gran poder limpiador y cuenta con la ventaja de que apenas hay que escurrirla, porque es de secado instantáneo y tiene una enorme capacidad de absorción gracias a sus materiales principales, que son el poliéster y el nylon.
Está indicada para suelos de interiores, para cualquiera de ellos. Es decir, se adapta a la perfección al parquet y a las tarimas florantes, al gres, mármol y cualquiera que le echen.
De hecho, aparte de ser más suave, también es más resistente, por lo que cada vez más personas están optando por esta opción. Y por supuesto, donde hay una ventana de oportunidad, ahí está Mercadona, que posee dos opciones bajo su marca blanca para productos de limpieza, que es Bosque Verde. Tiene un precio de 1,50 cada unidad, mientras que el pack de dos, que es la otra alternativa, tiene un coste de 2,95 euros. Por si se te rompe o deteriora, así no tienes que ir al supermercado deprisa y corriendo.
