En España somos grandes amantes, y no es para menos, del aceite de oliva, sea virgen o virgen extra. Es uno de los grandísimos tesoros de la gastronomía, un oro líquido único. Ahora bien, para grandes frituras solemos echar mano del aceite de girasol, ya que cumple con su cometido y es, sobre todo, mucho más barato.

En algunos supermercados de Aragón, aunque también es una tendencia que se extiende al resto de España, se ha comenzado a limitar la venta del aceite de girasol a un máximo de cinco litros por persona ya que Ucrania está considerado el granero de Europa y puede haber escasez no ahora, pero sí en unos dos o tres meses. Por eso, además, se han comenzado a ver los clásicos estantes vacíos de este bien, como bien sucedió en la fase más incipiente de la pandemia con el papel higiénico.

Esa fiebre por el papel higiénico no estaba justificada y fue una especie de psicosis colectiva, pero no es el caso del aceite de girasol, ya que sí que podría haber problemas en el futuro ya que el 63% del aceite que se importa es de Ucrania. Por eso, te contamos las alternativas para cocinar y para sustituir este producto.

Las opciones

La primera y la más evidente, la más saludable y sabrosa, pero también la más cara es apostar por el aceite de oliva, pero tal y como está ya la cesta de la compra, puede no ser una opción para todo el mundo. Es fuente de grasas saludables, eleva los niveles de colesterol "bueno" y reduce el "malo" y es una maravilla en sí.

Sin embargo, hay algunas alternativas más desconocidas, pero que también pueden servir sin problema. Tampoco es que sea excesivamente barato y tiene grasas saturadas, por lo que hay que limitar su uso, pero uno de los más ricos es el aceite de coco. No tiene apariencia de aceite porque es sólido, pero se vuelve líquido enseguida, en cuanto lo echas al fuego prácticamente.

Yendo un poco por regiones, en el mundo anglosajón se utiliza mucha mantequilla, que también te puede sacar de más de un apuro. Y en Asia, el aceite de sésamo es un as por sus propiedades, aunque es mejor consumirlo en crudo, a diferencia del de girasol. Además, aunque en España no se estila tanto, en América sí que se usa bastante el de cacahuete.

Y por último, el oro verde también tiene su aceite, el de aguacate, que es muy saludable y rico en ácidos grasos omega-3. Además, es antioxidante y una excelente alternativa que está presente en cada vez más supermercados.