En cuanto al orden y la limpieza hay unos grandes olvidados: los zapatos. Vaya, el calzado en general. Se suele quedar en las cajas de la primera compra, desperdigados por el suelo o en cualquier rincón olvidados. Y no solo tenemos un par, por lo que la sensación de desorden es bastante importante.

Ya lo defiende Marie Kondo y no es nada nuevo: el orden trae felicidad. O más bien, el desorden nos produce ansiedad, por lo que conviene seguir reglas sencillas como la de los dos minutos y echar mano de trucos de limpieza para conseguir que no nos estresemos en el hogar.

Así que qué mejor que un zapatero para tenerlo todo en orden. Al contrario de lo que se suele pensar los hay de muchos tipos y que huyen del clásico mueble. Y qué mejor también para tener un zapatero barato que echar mano de Ikea, que los tiene de muchos tipos y todos los precios, o de Lidl, que tampoco se queda atrás.

Ya te hablamos de uno más de corte tradicional de Lidl y de gran capacidad, pero también tiene su opción más low cost pero también con mucho espacio y con la ventaja del precio y de ser muy fácil de mover. Ahí donde hay una oportunidad, Lidl emerge.

Sus ventajas

Es un zapatero de tela negra. Esta especie de mueble tiene muchas ventajas ya que podrás guardar todo tu calzado de forma limpia, sin que acumulen polvo y además ocupa poco espacio. De hecho, su capacidad le permite guardar en su interior hasta 16 pares de zapatos convencionales, porque si hay pequeños en la casa o son chanclas quizá hasta entre alguno más.

El zapatero de tela negra de Lidl es de gran capacidad. Lidl

El zapatero tiene una cubierta frontal enrollable, por lo que si no quieres tener tus zapateros a la vista sólo tendrás que desplegarla y podrás esconderlos, así dará más sensación de mueble. Además se puede ampliar con otra estantería encima, por lo que el ahorro de espacio será máximo.

Además, en cuanto a sus características, tiene un armazón tensado de metal para darle estabilidad, compartimentos reforzados y pies protectores para no rayar el suelo. Sus medidas son 84x66x35 centímetros y pesa 2,8 kilos; y destaca también porque es fácil de montar gracias al sistema autoadherente y de encaje. Se vende a través de la web de Lidl y cuesta 19,99 euros, una ganga.