De repente notamos que nuestro WiFi en casa va más lento de lo habitual. No nos carga nada bien, va al tran tran... Reiniciamos el router y los dispositivos a ver si va a ser culpa nuestra y chequeamos con un test de velocidad si todo va bien. Nada de esto funciona y al final llegamos a una conclusión que queremos confirman: ¿Me están robando el WiFi de casa?

Verás que es muy sencillo, que solo se necesita un minuto, que es gratis y que se puede comprobar de manera muy fácil. Y ya a partir de ahí tratar de poner medidas como cambiar la contraseña de la conexión.

Si lo hago desde el móvil

La manera más clásica es usar Fing, una aplicación que se encuentra en la App Store de Apple o en la Play Store de Android, por lo que desde cualquier dispositivo en cuestión de segundos te la puedes bajar y comprobar. De hecho, solo en Android, tiene más de 10 millones de descargas, lo que da buena cuenta de su fiabilidad.

Solo tienes que abrir la app y evidentemente estar conectado a tu red WiFi para que automáticamente la detecte y escanee la información.

Entonces en la pantalla te saldrá qué dispositivos están conectados en ese momento y tendrás que saber cuáles son. Por ejemplo, debes saber qué marca o código marcará para tu móvil, tablet, ordenador portátil, ordenador de sobremesa, etcétera. También los dispositivos de la gente que en ese momento esté en casa.

Al aparecer en pantalla todos los dispositivos sabrás cuál no casa o cuál no es de los tuyos. Una recomendación que te hacemos es que hagas la prueba por la noche, cuando los posibles vecinos robawifi estén en sus domicilios.

¿Y desde un ordenador?

La herramienta se llama Wireless Network Watcher y con una simple búsqueda en Google se puede descargar facilísimo. Bájatelo, instala el programa y ejecuta la aplicación.

Verás que su funcionamiento es sencillísimo, como la app de móvil Fing. Solo tendrás que identificar cada dispositivo y cazar al intruso. Y en macOS un programa muy similar es LanScan, que funciona igual que los que te hemos enseñado.