Vaya por delante que el color de las paredes de las habitaciones infantiles es una decisión muy familiar y personal en la que incluso los más pequeños tienen poder de decisión. Y vaya por delante también que hay cientos de opciones diferentes ya solo con los colores, que se puede usar papel pintado también, que se pueden combinar colores en una misma pared o en las cuatro para darle vida... En definitiva, todo y más que puedas imaginar.

Ya hace mucho tiempo que el clásico estigma de que las habitaciones de los niños deben ser azules y rosas las de las niñas quedó atrás. Sí, son unos colores clásicos que nunca van a fallar y están tan interiorizados en la población que es facilísimo encontrar elementos decorativos que peguen con ambos colores, pero esa concepción ha quedado bastante atrás y se pueden emplear otros colores para darle mucha vida a una habitación infantil y que quedarán espectaculares.

Blanco

La habitación blanca es la más neutra, pero no por ello aburrida.

La habitación blanca es la más neutra, pero no por ello aburrida. Pinterest

Ideal para no fallar, pero cuida para que tu hijo o hija no lo vea como un lienzo gigante en el que dar rienda suelta a su creatividad. Lo mejor de todo es que se adapta a cualquier tipo de decoración, a cualquier mueble y a los juguetes. Difícil encontrar un color tan neutro. Quizá lo consideres algo aburrido, pero a una habitación infantil se le da mucha vida de manera sencilla.

Gris clarito

El gris claro puede quedar espectacular y sofisticado. Pinterest

La clave es que el resto de elementos sean blancos o de colores claritos y que sea una estancia luminosa de por sí para que luzca mucho más (nunca mejor dicho). Es un tono más sofisticado, pero en habitaciones infantiles se le puede dar una oportunidad, sobre todo cuando ya son algo más mayores.

Amarillo

El amarillo permite jugar con muchas opciones.

El amarillo permite jugar con muchas opciones. Pinterest

Más clarito, más potente, arena... Es un color que aparte de ser unisex ayuda a la concentración, lo cual de cara a la escuela es un punto a favor. Puede además ser un tono uniforme, se puede combinar en las cuatro paredes o integrarlo entre paredes blancas.

Verde pastel

El verde tiene un punto de positividad.

El verde tiene un punto de positividad. Pinterest

Se ha puesto de moda en los últimos años y no es para menos. Como en el caso anterior, puedes valorar pintar toda la estancia de ese mismo color o solo unas partes para crear un precioso efecto contraste. Tiene efecto relajante e incluso un toque de optimismo que no viene mal. También pega con casi todo, así que difícilmente fallarás.