A la hora de lavar la ropa y de cuidarla hay varios mandamientos y, aunque creamos que es tan sencillo como poner las prendas en la lavadora, poner un programa y ya, realmente no es así y hay muchos pormenores y aspectos a tener en cuenta. Cada prenda de ropa es un mundo, por eso es importante conocer y comprender el significado de las etiquetas que todas traen.

También hay que tener en cuenta cómo eliminar manchas difíciles, como por ejemplo de tomate o aceite, hay que saber que no hay que pasarse con la cantidad de detergente, que es mejor usar tu propio suavizante para la ropa y que no hay que cometer errores, porque así conseguirás que la ropa salga más limpia y cuidada.

A su vez, para la ropa blanca puedes emplear un blanqueador como el que tiene en su catálogo Mercadona y además, el propio electrodoméstico es necesario cuidarlo para que deje malos olores o se estropee antes de tiempo.

Pero hay cosas que suceden y que hay que arreglar. Y muchas veces no sabemos cómo hacerlo. Emplear desodorante es imprescindible en el día a día para evitar los malos olores del sudor en aquellas zonas que son sensibles, como por ejemplo las axilas, pero cuando las prendas tienen cierto tiempo, si no se lavan como se debería, pueden acartonarse. Y esas manchas son casi imposibles de quitar.

Dos trucos

Para eliminar esas manchas acartonadas hay dos trucos que son infalibles y que puedes poner en práctica y que emplean, por separado, a dos ases de la limpieza casera del hogar y que son el bicarbonato de sodio y el vinagre blanco de limpieza.

Para el primer método solo tendrás que llenar un bol, un cubo o mismamente el fregadero con agua caliente y echarle una buena cantidad de vinagre blanco. Después, sumerge la camisa o camiseta y déjala ahí toda la noche para que se ablande. Después tienes dos opciones, que son meterla a la lavadora para terminar de quitar las manchas y de paso quitar el mal olor del vinagre o repetir el proceso para seguir ablandando las manchas.

El segundo método consiste en hacer una pasta con bicarbonato y agua y frotar por las zonas afectadas. Déjalo actuar también bastante rato y, cuando creas que está, a la lavadora siguiendo las instrucciones de la etiqueta.