Cada vez la industria alimentaria avanza más y va innovando en la búsqueda de nuevos productos que satisfagan a cada vez más clientes. Y en el caso de los lácteos ese salto está siendo de gigante. Se puede observar por ejemplo en los estantes refrigerados de cualquier supermercado, donde los yogures, postres y derivados copan una gran parte.

Y también los clientes agradecen que las empresas y supermercados se esfuercen en ofrecer productos que, aunque estén procesados, son muy sanos, con poca o nula grasa y muy económicos. Como es este caso.

Es idóneo para desayunar por sus características y es una manera muy novedosa de consumir un alimento que en realidad lleva años y años entre nosotros. Ahora bien, esta nueva forma de comerlo le da otro aire y le ofrece un abanico de posibilidades gigante.

Fuente de proteínas

Estamos acostumbrados a comer el queso fresco en tarrinas que se desmoldan al más puro estilo de un flan, pero el queso fresco batido es toda una revolución. Tiene lo mejor de este lácteo, que es que si, se hace con leche desnatada, no tiene absolutamente nada de grasa, una cantidad muy baja de hidratos de carbono y un montón de proteínas.

Es decir, es un alimento completamente ideal para aquellas personas que quieren cuidar su figura y coger energía de una manera sana, para los que quieren adelgazar y bajar de peso, y también para los que desean ganar músculo y necesitan comer más proteínas.

Mercadona tiene el queso fresco batido de marca Hacendado.

Es de una textura muy cremosa, tanto que parece una especie de yogur griego o de queso de untar, pero evidentemente es mucho más sano que estas dos opciones, especialmente que el yogur al estilo griego.

Tiene un sabor que recuerda al de yogur, pero con un menor grado de acidez. De hecho, si has comido queso fresco sabrás que es muy sano, pero no especialmente sabroso.

Por eso, por su textura cremosa y su carácter saludable, así como sus características nutricionales, se convierte en un as en el desayuno, porque se puede agregar a un batido para darle cuerpo y consistencia, se puede comer en un bol con cereales (ojo, de los 0% azúcares y en cantidades moderadas), al natural o con unos frutos secos.

Se comercializa en su versión con leche entera, que tiene algo más de hidratos de carbono (pero poco), grasas y proteínas (12 gramos, aproximadamente), mientras que los desnatados pierden toda la grasa y unos gramos de proteínas (se quedan en 8), por lo que es una opción muy sana.