Es mucho más común de lo que imaginas. Pones la lavadora hasta los topes por aprovechar y no hacer más coladas, pones siempre el mismo programa, le das al botón de empezar con bien de detergente y bien de suavizante para que así salga más limpia y suave y ya está. Pues aunque no lo parezca todo esto acaba por dañar la ropa, reduciendo su vida útil y obligándonos a ir de compras cada menos tiempo.

Son fallos mucho más comunes de lo que piensas y que seguro que alguna vez o de forma recurrente cometes. Por eso, porque más vale prevenir que curar, os contamos los errores que no debes cometer a la hora de lavar la ropa para que no se deteriore.

Sobrecargar la lavadora

Ya te lo hemos introducido antes. No, no hay que llenarla hasta los topes porque el agua, el detergente y el suavizante no podrá penetrar bien entre los tejidos y aparte no se podrá mover libremente por el tambor del electrodoméstico, reduciendo su capacidad para limpiar las prendas. Se lavará, pero no al 100% de lo que podría.

Lavar en agua fría

Es verdad que se ahorra dinero, pero no es eficaz contra las manchas. En las etiquetas de las prendas viene especificado y si hay que lavarla a 30º como máximo es obvio que hay que respetarlo, pero hay otras que requieren de más temperatura para obtener óptimos resultados.

No tratar las manchas antes de lavar

Ya lo hará la lavadora, que para eso está, pensamos muchas veces. Dependiendo del tipo de mancha no va a salir por sí sola si no le echamos antes producto específico para retirarlas o un poco de detergente en la zona más problemática. Y por supuesto, cuando la metas en la lavadora ponla a la temperatura máxima que se pueda en función del tipo de prensa. Es decir, vuelve a revisar la etiqueta interna.

Usa lo recomendado de detergente y suavizante

Cuida el tambor de la lavadora limpiando el electrodoméstico de vez en cuando.

Los fabricantes siempre dejan una guía en ambos productos con las cantidades exactas en función de la carga y la dureza del agua y lo dicen por algo. No por echar más saldrá más limpia o suave la ropa. De hecho, al tratarse de químicos puede ser contraproducente así que hazles caso.

Cuida con la lejía

Si eres de los que la usa ten muchísimo cuidado porque es muy agresiva con la ropa y, por supuesto, destiñe la ropa de color. Aparte, tampoco está especialmente indicada para la lavadora, que se puede desgastar antes por su uso.

Prográmala si no estás en casa

No sacar la ropa de la lavadora al poco de terminar o al instante hace que se arrugue más y, sobre todo, que huela mal. Si no vas a estar en casa pero el tiempo no te abunda, prográmala para que cuando llegues termine o esté a punto de finalizar y puedas tenderla al momento.

No mezcles colores

Un consejo tan básico como el mecanismo de un chupete. La ropa blanca por su lado y la de color por otro para evitar desteñidos y disgustos cuando la saques del tambor.

El centrifugado

Solo está indicado para prendas de algodón, por lo que para el resto utiliza como máximo 1.000 revoluciones por minuto. La ropa se puede dañar si da vueltas a demasiadas velocidad.

Limpia la lavadora

Quizá una de las cosas que menos hacemos es cuidar el electrodoméstico que nos facilita toda la tarea de lavar la ropa. Necesita de vez en cuando que la pongas con un programa corto con un limpiamáquinas, que cuides los desagües y filtros y que mires de vez en cuando que la goma no tenga humedad o moho. Así se evitarán malos olores y mal funcionamiento.