La tecnología ha invadido nuestras vidas y nos mejora la calidad. Ahora nos cuesta vivir sin un ordenador, sin un teléfono con acceso a Internet y sin tantos y tantos aparatos que han copado nuestro día a día.
Hay electrodomésticos en casa que habíamos pensado que prácticamente habían tocado techo, pero nada más lejos de la realidad ya que siempre se puede innovar y mejorar hasta cotas insospechadas. Paso a paso eso sí.
El siguiente paso en cuanto al frigorífico se refiere es el empleo de aquellos que son inteligentes. Es decir, tienen funcionalidades extra con respecto a los de toda la vida, que más o menos sofisticados, con más o menos modos de frío o con más o menos modernidad "solo" tienen la función de enfriar los alimentos y bebidas.
Pero la tecnología e Internet han avanzado tanto que tenemos la posibilidad de aunar ambos mundos para hacernos la vida mucho más fácil.
¿Qué hace un frigorífico inteligente?
De primeras es necesario recalcar que no son muchos en el mercado y que las funciones irán a más. Y que cada fabricante tiene sus propias características y funciones.
De todos modos, a nivel general, los frigoríficos inteligentes suelen estar conectados al teléfono móvil y hacen cosas tan diversas como avisar de si se ha dejado la puerta abierta al detectar que está subiendo la temperatura (incluso a veces son señales acústicas), tener un modo vacaciones para bajar el consumo, aprovechar el móvil para ajustar la temperatura en función de tus necesidades...
Pero hay más. Hay algún modelo, como los de Samsung, que cuentan con la tecnología Compresor Inverter, que adecúa la velocidad del compresor a las necesidades de caja compartimento. Así, si un cajón está vacío, funcionará a distinta intensidad que otro que esté lleno, reduciendo así el consumo energético.
Todavía hay más
Los más avanzados tienen funciones para tener controlado en todo momento el inventario que hay dentro del frigorífico, lo que puede ser de gran ayuda a la hora de hacer la compra. También algunos modelos incorporan pequeñas cámaras interiores con las que ver a tiempo real qué tiene por dentro.
Y ya el cénit es que hasta tienen recetas incorporadas que se pueden consultar en una pantalla, televisión integrada o hasta micrófonos y altavoces para hablar con ellos como si de Siri o Alexa se tratase.
