Las freidoras de aire ya llevan unos años entre nosotros, pero ahora están viviendo su boom definitivo por la cantidad de marcas y opciones en cuanto a potencia, capacidad y precio que hay en el mercado. Antes era común que valiesen tres cifras y ahora por 50 euros hay alternativas muy válidas y que cumplen con su función a la perfección.

Lo que permite este tipo de electrodoméstico, mal llamado freidora porque en realidad es una especie de horno más bien que emplea aire muy caliente para cocinar los alimentos, es cocinar sin apenas o sin nada de aceite, por lo que el grado de calorías baja exponencialmente.

Tal es la diferencia que de hecho se puede reducir a un tercio o un cuarto entre si se hacen ciertos productos en una freidora de aire o si se hacen en una de aceite por el grado de absorción. También depende mucho del tipo de alimento, de sus características internas y de su cobertura, pero en lo que no hay duda es en que son mucho más saludables.

Y hay platos y preparaciones en los que la diferencia se nota mucho. Por ejemplo, se pueden realizar algunas verduras en la freidora de aire o incluso postres, pero la diferencia con respecto a si se cuecen va a ser nula o mínima. Pero en los fritos como tales, mucha.

Mejora sustancial

Empezamos por, quizá, el producto por el que más se popularizó este artilugio y son las patatas fritas. Uno de los grandes placeres de nuestra gastronomía es una delicia y de por sí no es muy calórica, siempre y cuando se prepare al horno, cocida o asada, pero frita...

Por eso, utilizar una freidora de aire es una opción magnífica, porque las patatas tienen una enorme capacidad de absorber aceite. Se pueden preparar sin nada o con una cucharada para ayudarles un poco.

Otro de los platos más típicos para cocinar en ese electrodoméstico son las alitas de pollo. La piel frita queda muy crujiente, sabrosa y rica, pero tiene grasa y todavía absorbe más, por lo que la diferencia también es importante. Eso sí, ayúdate de un poco de aceite en spray.

Y en general, cualquier tipo de alimento empanado también hará que sea mucho más sano. El pan rallado, el panko o cualquier tipo hace que "chupen" muchísimo aceite. Aparte de carnes, también entran croquetas, rabas de calamar, empanadillas... Ahora bien, te advertimos que el resultado no será igual ni parecido, porque ese crujiente se perderá.

De todos modos, aunque en sí no son productos sanos y si estás perdiendo peso no son muy indicados más que muy ocasionalmente, también permite cocinar otro tipo de alimentos, como por ejemplo pequeñas pizzas o piccolinis caseros o incluso churros, siempre y cuando sean congelados. Recuerda que para que fluya el aire la freidora tiene agujeros debajo y se podría escurrir.