Algunos de los alimentos que comemos no son tan saludables como parecen. A continuación, hablaremos de un caso que hace referencia a una cena de lo más socorrida por lo rápida y sencilla que se prepara, así como por su buen sabor. Sin embargo, podría perjudicar nuestra salud, según advierten algunos médicos y nutricionistas. 

Se trata, ni más ni menos, que del famoso ‘bikini’ o sándwich mixto, que se realiza con pan de molde, jamón york y queso. Pero antes de echarte las manos a la cabeza y olvidarte de él para siempre, debes saber que esto tiene un motivo, y se encuentra en la calidad de los ingredientes que se suelen utilizar para cocinar este plato. Esta es la explicación.

Pan de molde

En primer lugar, es necesario hablar del pan. Normalmente, para este plato se utiliza un pan blanco de molde. Este pan está compuesto de harinas refinadas, que se someten a unos procesos industriales que reducen su calidad nutricional, a diferencia del pan integral. Así, el pan blanco puede tener efectos negativos en nuestra salud porque eleva los niveles de azúcar en sangre, aumenta la tendencia a acumular grasa y puede producir un efecto inflamatorio en nuestro organismo.

Jamón york o jamón cocido

El siguiente ingrediente problemático es el jamón. No por ser jamón, sino por el tipo de embutido que utilizamos. A la hora de comprar un jamón yorkjamón cocido en el supermercado, es muy importante fijarse en la lista de ingredientes que aparecen. Y muy especialmente en el porcentaje real de carne de cerdo que contiene el jamón que vamos a comprar. Aunque resulte sorprendente, hay jamones que solamente contienen un 55% o 60% de carne real, y el resto de ingredientes añadidos no son lo más recomendable para la salud. Lo ideal es utilizar un jamón cocido que contenga, como mínimo, un 85% de carne de cerdo

Queso

Por último, es necesario hablar del queso. Según los nutricionistas, para que un queso se considere de buena calidad debe contener leche, sal, fermentos lácticos y cuajo; sin extender mucho más allá su lista de ingredientes. Por desgracia, a menudo los quesos que se utilizan para hacer sándwiches o bocadillos son de baja calidad -como los típicos 'tranchetes'- y contienen ingredientes como aceites refinados o aditivos que los convierten en ultraprocesados, no demasiado saludables.