Cómo acabar con las repulsivas manchas de sudor: el truco infalible
Se trata de una mezcla casera muy económica que elimina los halos amarillos de las prendas con un solo lavado
Las manchas de sudor son uno de los principales enemigos de la ropa. Especialmente la blanca. Aunque la sudoración es una función fisiológica necesaria para regular la temperatura corporal, a nadie le gusta ensuciarse ni oler mal. Y menos aún si no es por hacer ejercico.
El asunto empeora con la llegada del clima cálido, pero tampoco se salva uno de esta secreción en invierno. Portar numerosas capas y no retirarlas en los interiores favorece también la sudoración, que suele dejar esos molestos halos amarillentos en el tejido, sobre todo en la zona de las axilas, el cuello y los puños. Pero no hay que preocuparse, estas manchas se pueden eliminar con un sencillo truco.
¿Cómo eliminar las manchas de sudor?
Las manchas amarillas provocadas por el sudor (o el uso de desodorantes) no son nada fáciles de eliminar. En muchos casos, al ver que continúan tras el lavado, se opta por una solución radical. Tirar la ropa. Un desenlance totalmente innecesario que poco favor hace al bolsillo.
Si bien existen varios productos en el mercado que son muy efectivos contra las manchas, también hay soluciones caseras bastante eficaces. Una muy popular consiste en verter un vaso de vinagre blanco en un barreño con agua, y dejar la prenda manchada en remojo. Una vez que el vinagre se haya impregnado en el tejido, se procederá al lavado a máquina.
La solución definitiva
Aunque el vinagre es una buena opción para combatir las manchas, existe una mezcla que sin duda resulta muy efectiva contra estos desagradables halos amarillos. Una fórmula 'mágica' que eliminará la suciedad ocasionada por la sudor con un solo lavado.
Para ello, bastará con mezclar detergente para lavar los platos con unas cucharaditas de bicarbonato y agua, hasta formar una suerte de crema. Después habrá que aplicar la mezcla sobre la mancha, frotar suavemente y dejar que actúe durante unas horas.
Finalmente, se introducirá la prenda en la lavadora y listo. Adiós manchas. Eso sí, si la ropa es de color, conviene probar este truco en una pequeña parte del tejido, para ver cómo reacciona.
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